Horror en Cerrillos: vecinos denuncian olores nauseabundos del cementerio improvisado en cercanías al centro

SALTA (Redacción Voces Críticas) La pandemia de coronavirus ha demostrado que nadie se encuentra exento de portar el virus ni mucho menos de fallecer en consecuencia, tal es así que ya existen más de 600 fallecidos en la provincia de Salta. Bajo este contexto, más imágenes abrumadoras llegaron a nuestra redacción que dan cuenta del horror en Cerrillos con un cementerio a metros del centro. Los vecinos denuncian olores putrefactos.

En es sentido, varias fotografías tomadas por los vecinos del municipio de Cerrillos fueron enviadas a la redacción de Voces Críticas, con el único fin de demostrar lo que realmente se encuentra pasando en esa urbe: los muertos por coronavirus son enterrados en un baldío a solo unas cuadras del centro de la ciudad.

Según explicó de manera pública la intendente de Cerrillos, Yolanda Vega, el cementerio municipal que data de 1880 colapsó totalmente y es frente a esta situación que están llevando -de manera un tanto particular- la ampliación de la necrópolis en cuestión que ya estaba programada.

Sin embargo los vecinos del barrio San José y Evita, denunciaron constantemente la presencia de olores fétidos y nauseabundos, los cuales aseguran, provienen de la ampliación del cementerio que se está construyendo a escasos metros de sus hogares, pero en una propiedad privada y con calificación de factibilidad negativa al ser un terreno inundable.

En ese sentido se logró saber que los lugareños hablaron con varios medios e incluso realizaron la denuncia formalmente en la comisaría debido al putrefacto hedor proveniente del camposanto. Por si no fuere suficiente, los perros que abundan en el lugar raspan la tierra, como queriendo desenterrar a los fallecidos.

Fue el fiscal penal de Cerrillos, Gabriel Portal, quien ante los reclamos de estas personas decidió tomar cartas sobre el asunto, por lo que se ordenó la detención inmediata de entierros en ese terreno, hasta llegar a su poder la documentación que indique que el municipio puede "enterrar a personas en medio de los vivos".