Se destapó la olla en Santiago del Estero: medios nacionales desenmascaran el régimen autoritario de Zamora

(Por Corresponsalía Santiago del Estero) En incontables ocasiones el equipo periodístico de Voces Críticas, a través de minuciosas investigaciones se encargó de brindar informes sobre la situación irregular que se vive en la vecina provincia de Santiago del Estero, en donde el mandamás Gerardo Zamora, gobierna bajo un régimen policíaco de extrema violencia y muerte. Ahora se destapó la olla y medios nacionales desenmascaran también al sempiterno hombre de la política santiagueña.

En ese sentido, fue este lunes que el reconocido diario La Nación por su larga trayectoria  y excelente reputación, se encargó de firmar una editorial con el título "Santiago del Estero, bajo un régimen policíaco", en el cual relata uno a uno, los casos de violencia policial ejercidos por los uniformados durante la cuarentena, los cuales en varios casos terminaron en muerte y escándalo, que fueron tapados por los medios a fines al gobierno de Gerardo Zamora.

Lamentablemente Santiago del Estero se encuentra sometido a las órdenes de un Zamora que gobierna como un señor feudal en pleno siglo XXI, ya que no solamente dirime todo en el Ejecutivo sino que también tiene en la palma de su mano al Poder Legislativo y al Poder Judicial, el cual muchas veces utiliza como si fuera su propio brazo armado.

En otro de los pasajes escritos en la editorial del mencionado medio de comunicación porteño, se destaca a la figura de Gerardo Zamora por tratarse de una suerte de caudillo en su versión 2.0 ya que su reinado solamente es comparable con las épocas violentas ocurridas en el año 1853 bajo el mandato de Juan Felipe Ibarra, al tiempo que la figura de Carlos Arturo Juárez, se volvía insignificante al lado del actual mandamás santiagueño.

Es así que, el hecho de existir una oposición política completamente maniatada y totalmente débil en Santiago del Estero, son factores que ayudan a que el gobernador santiagueño se perpetúe más y más en el poder. A esto sumarle que un enorme porcentaje de ciudadanos trabajan en la administración pública, siendo la provincia con mayor índice con respecto al empleo público, contribuyendo así a que Zamora los mantenga más controlados que nunca.

Es de público conocimiento que en Santiago se estableció por decreto que la gente solo puede circular, de lunes a viernes, de 7 a 21, y los sábados, domingos y feriados, de 7 a 18. Sin embargo bajo ese contexto se llevaron adelante varias detenciones injustificadas por parte de la policía y lo hacen porque quieren y pueden. La respuesta aunque escueta y superficial es así de simple. Y es que se comprobó que durante los últimos 6 meses, cuando todavía regía la fase más estricta de la cuarentena y hasta hace unos días atrás, los uniformados santiagueños, bajo órdenes del mismo Zamora, propinó una innumerable cantidad de detenciones inicuas y abominables.

Indudablemente el acto más atroz y escalofriante llevado a cabo por la policía santiagueña durante la cuarentena, está relacionada con la Comisaría Nº10 que se transformó en una copia fidedigna campo de concentración de Auschwitz, ya que allí se torturó hasta la muerte a un joven de 22 años que había sido detenido. Se trata de Mauro Coronel, quien el pasado 2 de mayo falleció luego de haber sido internado de urgencia en el Hospital Regional a donde llegó con severas heridas provocadas por la brutal paliza propinada por los uniformados en la mencionada comisaría, por si fuese poco, lo habían dejado atado como a un perro en la intemperie.

Luego, a finales del pasado mes de agosto, la sociedad santiagueña se veía convulsionada al trascender el asesinato de Franco Isorni por parte de la policía de Gerardo Zamora, a la cual la acusan de haber actuado bajo la modalidad que se conoce como Gatillo Fácil, ya que fueron varios los testigos que vieron cómo los uniformados dispararon sus armas de fuego contra la humanidad del joven cuando este se desplazaba en su motocicleta.

Ante este brutal episodio que atenta claramente contra los derechos humanos y que con la ayuda del encubrimiento del aparato oficialista se catalogó como un “simple accidente de tránsito”, es que cientos de santiagueños enfurecidos salieron a protestar a las calles en pedido de justicia por Franco y por todas las víctimas de la impunidad en Santiago del Estero.

Durante los últimos 15 años, que fueron en los que gobernó esta suerte de régimen Zamoriano, el pueblo santiagueño siempre recriminó el despilfarro de dinero en cuestiones banales, llamadas "obras faraónicas", cuando existen cuestiones que son prioritarias en toda la provincia. Como los problemas de escases de agua, energía eléctrica y gas en el interior. Tal es así que más de 1000 millones de pesos fueron destinados para la creación del Estadio Único, mientras Santiago del Estero tiene, por lejos, los peores índices de pobreza, desempleo, mortalidad infantil y desatención a la salud pública.

Este último punto fue el detonante para preguntarse si el sistema sanitario en Santiago se encuentra preparado y apto para afrontar las condiciones más críticas y crudas de la pandemia de coronavirus. Ante esto, de más está decir que el oficialismos asegura con fanfarrias que sí se encuentran preparados. Sin embargo esto lleva a preguntar, de ser así como ellos afirman, ¿por qué se instaló una cuarentena tan rigurosa y llena de sanciones violentas a quienes infraccionaban la medida?

La respuesta sería sencilla, evidentemente no se encuentran dadas las condiciones sanitarias para llevar adelante una flexibilización en la vecina provincia.

"Los santiagueños no tienen más salida que tolerar resignados estos despropósitos, aunque en la intimidad cundan el enojo, el cansancio y la desesperación, con algunas tímidas manifestaciones aisladas de protesta, que amenazan con multiplicarse", refleja uno de los últimos párrafos de la editorial del mencionado medio nacional.