Noelia Marzol dio una nueva muestra de su calidad como bailarina con un salto impresionante

Los famosos, al son de lo  que sucede a nivel Salud, han mutado de fases a lo largo del aislamiento social obligatorio.  Al parecer ya dejaron de lado la fase “muestro como cocino” para pasar a la que podemos llamar “me pinto el clásico”. O por lo menos eso parece a juzgar por las últimas publicaciones de algunos de ellos, donde se los ve ejecutando desde el interior de sus hogares jugadas pasos de baile de salón, como el caso de Noelia Marzol hace pocas horas.

El génesis arrancó con el Chino Darín quien esta semana se lo pudo ver en ropa interior de color blanca, balando al estilo Julio Bocca, en una sala de su casa de Palermo que causó el furor de sus seguidores.  Ahora la bailarina del staff de Muscari hizo lo suyo, y subió una foto en ropa interior rosa mientras se eleva en el aire en un hermoso paso de danza. A su vez acompañó con un epígrafe donde daba cuenta lo complejo que es para ella el mantenerse quieta, "es evidente" confiesa, frase que queda más que claro al ver el gran salto realizado.

Veinte mil Like tuvo la foto, de la bailarina y novia del defensor de Almagro, en menos de un día de publicación, y por supuesto varios mensajes.  En esta caso destaca incluso la graciosa acotación de Marley quien anunció que él tiene un instantánea igual “hice el mismo salto” destacó y la rubia le pidió una prueba de ese acontecimiento. Vale recordar que ambos fueron compañeros cuando formaron parte del exitoso ciclo de juegos, Minuto para ganar, transmitido por Telefe.

En la última semana, Noelia Marzol, fue tendencia tras un vivo en Instagram con sus fanáticos donde respondió todo tipo de preguntas. Contó, por caso, que no practica ninguna religión, sino que por el contrario es atea por convicción. Sin bien viene de una familia católica, dejó de creer hace años.  También hablo de la pandemia, de su gana de ser mamá a lo que anuncio que “espero que antes de diciembre espero poder quedar embarazada”.  La rubia dio detalles de la convivencia con su pareja, que no piensa en casarse y que todo arrancó cuando él dejó un cepillo de dientes en su casa,  a partir de allí comenzó una convivencia que parece se llevan bien.