¡Unos vivos bárbaros!: Para abrir en plena pandemia, un gimnasio se registró como iglesia

La creatividad así como la necesidad de reinventarse llevó a que más de un emprendedor tuviera que adaptarse a estos tiempos extraños que parecen no llegar a su fin. Y en todo el mundo uno de los sectores más golpeados fue el de los gimnasios puesto a que los estrictos protocolos de distanciamiento no permiten que vuelvan del todo. Por ello en Cracovia (Polonia) encontraron una solución a sus problemas. 

Para evitar las multas, suspensiones y la clausura los dueños de un centro de entrenamiento apelaron a una estrategia tan original como desubicada, puesto a que registraron el lugar como Iglesia y comercio como una estratégica manera de evitar las medidas sanitarias del gobierno y el cierre definitivo. 

La sorpresiva noticia cobró estado público cuando la policía del lugar pasó por inmediaciones al complejo deportivo y notaron la presencia de personas que estaban entrenando sin ningún tipo de problemas. Ante esto decidieron registrar a los presentes y consultar la documentación del lugar. 

Increíblemente los papeles que tenía el lugar lo habilitaba como un local comercial donde los usuarios pueden probar productos y a la vez como una iglesia que ofrece reuniones para promover una vida saludable. Por ende, no se pudo proceder al cierre del gimnasio puesto a que todo estaba aparentemente en regla. 

La palabra del dueño

No pasó mucho tiempo para que todos quisieran contar con los testimonios del dueño del lugar, por lo que la gerente del gimnasio explicó que: "“No me gustan las lagunas legales, pero no tenemos otra opción. No sé por qué atacaron la industria del fitness cuando las iglesias están abiertas, los centros comerciales están funcionando".