Alianzas salteñas: cuando lo que importa es sobrevivir

SALTA.- (Por Daniel Salmoral para Voces Críticas) La inscripción de los frentes electorales provinciales, desnudó, quizás como nunca antes, hasta donde están dispuestos algunos dirigentes políticos de llegar, con tal de conservar sus lugares de privilegio.

En esta oportunidad, desde diversos sectores políticos, la traición y la incoherencia estuvieron a la orden del día y esto aparece de manera clara cuando se miran los nombres de los partidos que integran las alianzas electorales registradas ante la Justicia Provincial.

Partidos y dirigentes que hasta sólo horas atrás estaban en las antípodas, hoy comulgan en espacios comunes y se muestran dispuestos a marchar juntos con la única intención de no ser marginados de los cargos provinciales, tanto ejecutivos como legislativos, que estarán en juego.

No importó para nada el hecho que la ideología política se diera de patadas y que dirigentes que hasta ayer se criticaban con fiereza ahora sonrían para las fotos y ante las cámaras de televisión, diciendo que dejaron atrás sus diferencias “en aras del bien general de los salteños”.

Esas frases suenan huecas, falsas, y provocan risas dando pie para que toneladas de memes invadan las redes sociales, haciendo las delicias de quienes los crean y que son, en verdad, los mejores intérpretes del sentir popular ante situaciones de poca credibilidad como estas.

Veamos algunos ejemplos:

Juan Manuel Urtubey, el precandidato a vicepresidente de Roberto Lavagna en “Consenso Federal”, y presidente del justicialismo salteño, recorre el país tratando de convencer a los argentinos que deben dejar atrás al kirchnerismo porque son la ineficiencia y la corrupción, pero en su provincia sumó su partido al frente K que lidera Sergio “Oso” Leavy quien es la imagen viva de Cristina Kirchner en Salta.

Esto qué significa. ¿Qué el kirchnerismo es lo peor para el resto del país pero lo mejor en Salta por eso los convierte en sus socios políticos?

Al parecer sí, y esto también deja en claro que Urtubey ya abandonó el PJ salteño dejándolo en manos de Miguel Isa y Manuel Santiago Godoy, adelantando que sus pasos políticos después de esta elección, se dirigirán para conformar otro espacio alejado de la liturgia, la marcha y los bombos del peronismo tradicional.

“Juan (Manuel Urtubey) está más allá del peronismo. Demostró entender los nuevos tiempos de la política y lo que reclama la sociedad por eso seguramente, pasada esta elección, junto a otras figuras como Martín Lousteau, María Eugenia Vidal, Adrián Pérez, Horacio Rodriguez Larreta y peronistas como Sergio Uñac, Rosana Bertone, y otros gobernadores ‘sub 50’ que, de perder Cristina, rápidamente buscarán otros rumbos y crearán nuevas expresiones políticas lejos de lo que conocemos ahora», comentó muy seguro de sus palabras, un asesor político del precandidato a vicepresidente de «Consenso Federal».

Mientras esto aflora desde el peronismo, el oficialismo de la UCR salteña también hace su importante aporte a este increíble festival de incoherencias.

Quienes renegaron y denostaron a un grupo dirigencial que decidió sumarse al frente politico de Gustavo Sáenz, argumentando que es peronista, no tuvieron complejos en tirar por la borda más de un siglo de historia haciendo alianza con el controvertido Alfredo Olmedo, cuyo pensamiento y acciones están en el otro extremo de la génesis y el derrotero político de su partido.

La UCR, acérrimo defensor de la libertad y de los valores humanos, acaba de atar su futuro político en la provincia con un político que anda por la vida pidiendo pena de muerte, castración química para violadores y servicio comunitario para jóvenes, una especie de servicio militar sin armas pero con igual rigor, para quienes no encuentran destino y son al parecer “la sobra” del sistema.

“Qué tiene que ver la filosofía personal y política de un Raúl Alfonsín, por ejemplo, con posiciones extremas como las del Olmedo quien, si pudiera, abriría nuevamente el terrible penal de Ushuaia”, sostuvo un ex legislador.

Indudablemente, no existe ninguna comunión de ideas entre ellos pero al parecer para Mario Mimessi, presidente del partido; Alberto Espeche presidente de la Convención y Miguel Nanni el verdadero mandamás de la UCR salteña, las coincidencias con el empresario sojero son “totales” por eso mansamente se entregaron al hombre de la campera amarilla con el falaz argumento que “así lo quiere la mayoría de los radicales”, cuando en realidad son más los “correligionarios” que repudian el acuerdo que, por otro lado, estaría viciado de nulidad, según el Ateneo “Arturo Illia”, porque nunca la Convención Provincial habría autorizado al triunvirato, ahora más conocido en la sede de calle Mitre, como “Los Tres Chiflados”, a realizar alianzas con nadie ya que ésta es facultad exclusiva del máximo órgano de conducción del partido, que no es otro que la Convención.

“Esta entrega vergonzosa sólo le sirve a Nanni para ver si retiene su banca en el Congreso y a Mimessi que sueña con ser el nuevo intendente de Tartagal. Lo que hicieron no tiene perdón y lo pagarán a la hora de salir a pedirle el voto a los correligionarios que jamás se imaginaron una cosa así. Lo que pasa es que el gorilismo de los tres (Espeche, Nanni, Mimessi) es tan grande, que son capaces de entregarle el partido a Drácula antes que acordar con el peronismo”, aseguró un viejo radical, aunque quedó demostrado que a la hora de salvar el pellejo, Nanni, por absoluta conveniencia personal, no le hizo asco a la hora de sacarse mil fotos con Juan Carlos Romero, a quién cuestionó, además de salir abrazado y sonriente a su lado y compartir caravanas.

¿Se habrá olvidado la troika que el origen político de Olmedo es el peronismo?. Parecería que sí.

Otro que aportó lo suyo a la confusión general es el diputado nacional, Javier David, quién después de deambular por el romerismo, el macrismo, el urtubeycismo y el kirchnerismo, ahora recaló en el saencismo, que fue el único sector que le abrió la puerta, al parecer para que baje pretensiones y juegue sus chances políticas en las PASO provinciales en la candidatura a intendente de Salta.

Cómo será de grave la crisis en los partidos, que hasta la izquierda cayó en la confusión general y mostró fisuras entre su tropa que siempre, salvo ahora, se había mostrado coherente y compacta.

Al parecer, y después de ver este aquelarre dirigencial que saltó de un lugar a otro sin ningún problema, queda claro que lo único que les importa a algunos políticos salteños, es no quedar afuera del juego aunque para ello, como el Fausto, hayan tenido que venderle su alma al Diablo.

Por  Daniel Salmoral para Voces Críticas