Murió Ricardo Barreda: la historia de vida detrás del homicida

ARGENTINA.- (Redacción Voces Críticas) El femicida Ricardo Barreda murió hoy en el geriátrico Del Rosario de José C. Paz, Buenos Aires, por “causas naturales". El homicida tenía 83 años de edad había sido condenado a prisión perpetua por asesinar el 15 de noviembre de 1992 en su casa a su mujer, sus dos hijas y su suegra. 

Ricardo Alberto Barreda nació en La Plata, Buenos Aires el 16 de junio de 1936. Ejerció como odontólogo hasta 1992, cuando asesinó a su esposa, Gladys McDonald, a sus dos hijas, Cecilia y Adriana Barreda y a su suegra, Elena Arreche.

El odontólogo homicida de  joven era una persona con carácter fuerte que con el paso del tiempo logró controlar y desarrollar su lado más sensible. Estudió y ejerció su profesión con éxito en La Plata. Era un individuo de tono pausado, considerado un buen vecino, que trataba bien a sus pacientes, un tipo tranquilo y asiduo concurrente del Jockey Club donde se codeaba con la sociedad platense.

A Barreda le frustraba que nadie en su casa lo respetara, su hija mayor (Cecilia) se convirtió en abogada y la menor, Adriana se convirtió en odontóloga igual que él. Vivía con 4 mujeres que lo insultaban y denigraban, entre él y su esposa había un distanciamiento total y sus hijas resentían la situación tomando partido siempre por su madre. Por lo tanto, Ricardo se consiguió una amante llamada Hilda Bono. 

Fue condenado a reclusión perpetua en uno de los juicios orales y públicos con mayor audiencia de la historia penal argentina. Se lo encontró culpable del delito de triple homicidio calificado y homicidio simple. Después confesaría: "Lo volvería a hacer porque vivía en un infierno y me tenían loco".