Las razones que dio el Gobierno para el abrupto final del velorio de Diego Maradona

SALTA (Redacción Voces Críticas).- Como no podía ser de otra manera, el velorio de Diego Maradona en la Casa Rosada terminó convirtiéndose en un hecho político en el cual estuvo involucrado el gobierno de Alberto Fernández que, fiel a la liturgia peronista, intentó convertir las exequias del mayor futbolista de todos los tiempos en un hecho histórico con el sello del justicialismo. Sin embargo, los desmanes que ocurrieron fuera del palacio de gobierno cuando se anunció el abrupto cierre de las puertas a las 16, cuando todavía quedaban miles de fanáticos haciendo filas, empañaron lo que pretendía ser un hito del kirchnerismo. 

El mismo día que murió Maradona, el miércoles pasado al mediodía, el oficialismo echó a rodar la versión de que un millón de personas concurriría a darle el último adiós al DT de Gimnasia y Esgrima de La Plata. Empero, los deseos de Alberto Fernández chocaron con la voluntad de la familia del "10" que puso un tope a la utilización política cuando advirtió que el Gobierno soñaba con un evento de tres días para que desfilen cientos de miles de personas por Balcarce 50, de igual manera que ocurrió cuando falleció Néstor Kirchner. 

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Debido a la firme voluntad demostrada por Claudia Villafañe, los planes debieron reformularse, aún cuando no estaba previsto ningún operativo de seguridad para manejar la cantidad de personas que desde la noche anterior aguardaban en la Plaza de Mayo y alrededores para ingresar a la Capilla Ardiente a dar el último adiós a Diego Maradona. El problema sobrevino cuando cerca de las 14 se anunció que las puertas se cerrarían a las 16 y que sólo podría entrar aquellos que lleguen en la fila y el resto quedaría afuera. Pese a que hubo varios intentos, no hubo forma de convencer a la ex esposa del jugador del Napóles y a sus hijas Dalma y Giannina de cambiar de idea.

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Cuando el fin del velorio era insoslayable, sobrevino el desborde con enfrentamientos entre los hinchas y la Policía Metropolitana en la calle y con funcionarios resguardados en el palacio ante la invasión de fanáticos en todos los rincones de la Casa Rosada, en un hecho inédito por la vulneración del operativo de seguridad que puso en riesgo a las principales autoridades de la Nación. A raíz de los desmanes, el Gobierno nacional emitió luego un comunicado para explicar lo sucedido en la siesta del jueves, antes de que el servicio fúnebre partiera hacia Bella Vista, en donde Maradona fue enterrado junto a sus padres.    

Hoy, 26 de noviembre, cientos de miles de argentinos y argentinas realizaron una fila de decenas de cuadras para despedir a Diego Armando Maradona. La Casa Rosada abrió sus puertas a las 6 de la mañana y se inició una despedida muy emotiva y organizada.

La familia había escogido realizar el velatorio en la Casa Rosada, decisión que el gobierno acompañó. Posteriormente, la familia decidió culminar el mismo a las 16hs.

El objetivo del gobierno nacional siempre fue que pudiéramos despedir a Diego de forma pacífica, sabiendo que todo el país y gran parte del mundo está conmocionado por su fallecimiento.

Cuando el horario de finalización se acercaba, varias personas que estaban en la fila comenzaron a saltar las rejas para ingresar de manera irregular. Ante esa situación, se suspendió por unos minutos el ingreso. Cuando se volvió a habilitar algunas personas ingresaron rápidamente, sin cumplir las indicaciones del personal a cargo.

Por ello, la Casa Militar habilitó un conducto de salida por el Patio de las Palmeras y la Explanada, donde permanecieron con cánticos durante unos minutos.

Una vez que se controló de manera pacífica la situación, la familia transmitió su deseo y voluntad de dar por concluida la ceremonia. Por lo tanto, los restos mortales de Diego Armando Maradona serán trasladados al Cementerio de Bella Vista.