La historia de la Harley Davidson que integra la herencia de Diego Maradona

Quienes se encargaron de darle forma dicen que el objetivo fue muy  claro: armar una moto sobre cómo se vería Diego Maradona si no hubiera sido un jugador de fútbol sino una motocicleta y no podía ser de otra manera. Tenía que ser una Harley Davidson única, auténtica e irrepetible es por ello que se creó: Yo soy Diego. 

Se trata de una pieza personalizada hasta en el más mínimo detalle y que fue un regalo que se le hizo a el astro del gol durante el año pasado. Fue el club Dínamo Brest de Bielorrusia, donde supo ser presidente, la entidad que quiso homenajearlo con este tremendo e impactante regalo que respetó el objetivo de su creación. 

La impresionante motocicleta tiene cada uno de sus detalles, cada centímetro pensado en Maradona es por ello que en la rueda delantera tiene una pelota dorada y el número 10 en el frente. Destacándose el tanque de nafta lleva los colores de la camiseta de la selección argentina y la reconocida firma bordada en el asiento. 

Sobre este impresionante obsequio que recibió Diego Maradona, Yuri Shif cabeza del proyecto de esta moto personalizada, explicó que se trató de un pedido del presidente del club Dinamo. Misma entidad que también le regaló un anillo con una piedra preciosa que se tranformó en cábala durante su paso como DT de Gimnasia de La Plata.

El precio

La más que original moto que pertenecíó al Diego es una verdadera obra de arte y como tal cotiza muy alto; está valuada en una suma que oscila los 30.000 y 40.000 dólares y dado a que nunca fue trasladada a suelo argentino, aguarda en Europa oriental por la repartición de bienes de la sucesión.