Gran preocupación en la OMS por la nueva enfermedad que golpeará al mundo

La pandemia de COVID-19, poco a poco y con algunos contratiempos y muchas tragedias, pasará a la memoria. Este coronavirus puede desaparecer y luego reaparecer, continuar endémicamente bajo el control de la vacuna o simplemente atenuarse y desaparecer. La economía y los sistemas de salud volverán a una nueva normalidad, algunas partes más rápidamente que otras. Pero ahora surgió una nueva enfermedad que amenaza a todo el globo.

“El problema es que hemos hecho todo esto antes y parece que no hemos aprendido las lecciones que enseñaron nuestros predecesores”, advierte el doctor Kenneth V. Iserson, profesor de Medicina de Emergencia, director del Programa de Bioética de Arizona en la Facultad de Medicina de la Universidad de Arizona y autor principal de la investigación, sobre la nueva enfermedad que generó gran preocupación en la OMS.

Para resaltar el peligro y priorizar la investigación, cada año la Organización Mundial de la Salud (OMS) encarga a un comité de expertos que actualice su lista de las enfermedades infecciosas más amenazadoras que carecen de tratamientos o vacunas eficaces.

La lista actual incluye al COVID-19, dado que el mundo entero ahora está enfocado en ese patógeno. “Lo que debería actuar como una llamada de atención para financiar seriamente la vigilancia, la investigación y el tratamiento de la amplia variedad de posibles agentes pandémicos es la entidad al final de la lista corta: la ‘enfermedad X’”, sostiene Iserson en relación a la nueva enfermedad.

CUATRO SOSPECHOSOS EN BRASIL POR LA NUEVA CEPA

El Gobierno de San Pablo anunció que se suman dos nuevos casos sospechosos de la nueva variante del virus, de esta manera serían cuatro los posibles contagiados con la cepa identificada en Inglaterra. A su vez, Chile ya confirmó su primer caso positivo y crece la preocupación en la región.

Los dos primeros casos sospechosos fueron anunciados por el laboratorio privado DASA, que notificó al Instituto Adolfo Lutz y a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, uno de los pacientes había regresado a Brasil recientemente desde el exterior.