Violencia policial en Salta: le dieron una brutal paliza a un hombre y luego lo volvieron a atacar en el hospital

SALTA (Redacción Voces Críticas) Un episodio clara violencia policial tuvo lugar en Salta, cuando cuatro efectivos de la Policía de la Provincia le proprinaron una brutal paliza a un hombre en plena vía pública. Lo peor fue que luego lo volvieron a increpar cuando era atendido en un hospital. Ahora la causa será elevada a juicio por el pedido de la fiscal penal de Derechos Humanos, Verónica Simesen de Bielke.

Se trata del brutal episodio de violencia policial que tuvo lugar el pasado 20 de junio del 2019 en horas de la madrugada, cuando cuatro efectivos de la Policía de la Provincia pertenecientes a la División Seguridad Urbana de Rosario de la Frontera, le propinaron una feroz paliza a un hombre mayor de edad cuando intentaba ingresar a su domicilio.

¿Quiénes son los policías involucrados?

Es en tal sentido que las imputaciones por la violencia policial ejercida recayeron sobre los efectivos José Rodríguez, José Marti, Yonathan Díaz y Paulo Humano, quienes ahora se encuentra acusados de los delitos de vejaciones calificadas por el uso de la violencia y lesiones leves en concurso ideal, en calidad de coautores, en perjuicio de un joven.

Según se pudo saber, todo inició cuando de repente la víctima de la golpiza se disponía a entrar a su domicilio en ubicado sobre calle Tucumán de la localidad de Rosario de la Frontera, cuando de repente aparecieron dos camionetas de la policía, se bajaron varios efectivos, lo agarraron al sujeto por la espalda y lo empujaron de lleno contra la pared para golpearle fuertemente su cabeza.

Luego de eso lo llevaron detrás de la cabina de uno de los móviles. Allí comenzó la salvaje golpiza, y es que lo pisaron, le dieron golpes de puño que le dejaron lesiones notorias en todo el cuerpo y en su rostro, las cuales fueron constatadas luego por médicos profesionales.

Ataque en el hospital

Ya cuando el joven llegó al hospital para llevarse a cabo la revisión de médico legal, el padre de la víctima pudo obsevar como su hijo era golpeado en el rostro. Ni lerdo ni perezoso el progenitor llegó a filmar la situación, pero su hijo fue trasladado a otro pasillo y allí los uniformados aprovecharon para seguir dándole golpes.