Andar en auto aumenta el riesgo de contagio por COVID-19 pero hay un truco para evitarlo

MUNDO (Redacción Voces Críticas) Una de las principales recomendaciones para evitar contagios masivos en medio de la pandemia del coronavirus era evitar aglomeraciones o estar en lugares cerrados, con poca ventilación, como también evitar el uso del aire acondicionado. Sin embargo, hay espacios que es casi imposible evitar como el del automóvil o camioneta, razón por la cual brindaron algunas recomendaciones para reducir el riesgo estando en un vehículo. 

El de los autos, al ser un espacio reducido y mal ventilado, se convierte en propicio para la transmisión del COVID-19. Bastarán algunos segundos para que se produzca el contagio ya que al estar en el aire es sencillo que se disperse, mucho más cuando las altas temperaturas del verano obligan a los conductores a cerrar las ventanillas y prender el aire acondicionado.

A raíz de este interrogante sobre el virus, se efectuó un estudio en la Universidad de Massachusetts, encabezado por el profesor Varghese Mathai que explicó que para evitar el coronavirus es de vital importancia que las ventanillas permanezcan bajas incluso cuando solo hay dos personas en el interior del auto ya que esto favorece la corriente de aire y evita las enfermedades.

Para comprender cómo funciona en el interior de los vehículos el coronavirus, realizaron un trabajo de simulación de "dinámica de fluidos computacional" y descubrieron que en un auto conducido a 80 kilómetros por hora con 2 personas se genera un gradiente barométrico y el aire va desde la parte trasera hasta la delantera del vehículo.

Según Varghese Mathai, el hecho de abrir las ventanillas ayuda a evitar el contagio de coronavirus ya que permite que el aire fluya hacia adentro y luego hacia afuera lo cual podría salvar vidas teniendo en cuenta que mucha gente utiliza taxis o remises para moverse en la ciudad.

Por supuesto, el uso de barbijos para luchar contra el coronavirus es clave para evitar el contagio por gotas grandes que son expedidas por los pasajeros cuando tosen, estornudan e incluso también al hablar y acercarse al conductor.