Alex Caniggia les pasó el trapo: el emperador humilló a sus compañeros en Masterchef Celebrity

Alex Caniggia participó del jueves de última chance, luego que toda la semana haya penado en la cocina. Para evitar el domingo de eliminación, los participantes tuvieron que prepararse para tres desafíos con los que se enfrentaron esta noche. El primero de ellos, fue ponerle la tapa a varios tuppers que se encontraban en una mesa giratoria. Andrea Rincón fue la primera ganadora y la encargada de otorgar las dificultades para ingresar al mercado. 

Confiado en sí mismo, el hijo de Mariana Nannis le dijo que le diera el que marcaba treinta segundos menos en el mercado. Fue así como, a pesar de estar en desventaja, logró obtener todos los ingredientes necesarios para preparar su plato. En los 60 minutos tuvo que ejecutar y emplatar, en el contenedor que armó al principio, un delicioso menú que se llevaría a algún lado en ese recipiente.

"Me huele a barat", comenzó expresando Alex Caniggia apenas escuchó lo que había que hacer. Pasando por alto sus preconceptos, se abocó a la tarea de deslumbrar al jurado con los sabores que tenía en su cabeza. Para ello contaba con un buen pedazo de bola de lomo, mango, panceta, huevo, entre otros. Cuando pasó Donato por su estación de trabajo, le contó todo lo que tenía pensado y este le dijo que el camino era por ahí.

Cuando llegó la hora de la devolución, el mediático hermano de Charlotte Caniggia estaba un poco nervioso con su elección. Pero cuando se topó con el jurado, este terminó felicitándolo por el trabajo realizado. "Hacía tiempo que no comía un sandwich así, que cueste agarrarlo, que chorrea. Todavía no sé cómo cocinas así", remarcó Martitegui. Por su parte el italiano pidió un aplauso de sus compañeros: "Buena carne, pan bien tostado. Aplauso de pie". 

Más excitado que de costumbre

Esta noche, Alex Caniggia explicó lo que le está pasando con la cocina, desde que se encuentra participando de Masterchef. estimulado por el calor de las hornalla y alentado por la adrenalina de la competencia, apeló a uno de sus trucos favoritos: la llamarada. "¿Viste eso?", le consultó en plena ebullición a Daniel Aráoz que se encontraba detrás suyo. "Me excita la cocina. Me excita. Hoy voy al balcón muchachos. Perdón", lanzó un Alex casi en trance, mientras el cordobés pedía entre risas llamar a los bomberos.