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Carla Vizzotti realizó una curiosa defensa de la suspensión de las clases presenciales apelando a un sinceramiento brutal

La ministra de Salud afirmó que el Gobierno nacional “no desconoce que el escenario ideal es la presencialidad”.

Carla Vizzotti realizó una curiosa defensa de la suspensión de las clases presenciales apelando a un sinceramiento brutal

ARGENTINA (Redacción Voces Críticas) Carla Vizzotti realizó una curiosa defensa de la suspensión de las clases presenciales apelando a un sinceramiento brutal. La ministra de Salud afirmó que el Gobierno nacional “no desconoce que el escenario ideal es la presencialidad”. De esta forma, y en línea con lo que viene diciendo el presidente Alberto Fernández y parte del Gabinete, la funcionaria defendió este lunes la implementación de las clases virtuales.

Al menos, en aquellas ciudades de la Argentina que se hallan en peor situación epidemiológica a causa de la pandemia de COVID-19 y en ese marco fue que la funcionaria nacional advirtió que, a razón del contexto actual, “problemas de salud mental vamos a tener todos” y no solo los alumnos que no pueden ir a las aulas. En ese sentido, aseveró que el Gobierno nacional “prioriza la educación, sin desconocer que el escenario ideal es la presencialidad”.

No obstante, Carla Vizzotti subrayó asimismo el hecho de que “hay una pandemia que genera” que bajo esa modalidad “haya una movilidad de personas que, como se ha visto en muchos países, y en la Argentina también, luego aumente en forma muy importante el número de casos”. Fue entonces que remarcó nuevamente que “problemas de salud mental vamos a tener todos porque estamos viviendo una situación crítica, humanitaria, que no tiene precedentes en este siglo”.

La situación de los adultos

En esa línea, admitió que “por supuesto que es un problema grande para los niños y adolescentes, que no tienen la posibilidad de hacer todas esas cosas de la juventud, como salir, relacionarse”. No obstante, sostuvo que este escenario “es muy difícil también para los adultos mayores, para las personas que se acaban de casar, para los que tienen que ir a trabajar, para los que solían viajar, para todos”, porque “no hay nadie que sea feliz en este contexto o que no esté preocupado”.

“A mí me parece que la sociedad está muy cansada. Realmente es un esfuerzo muy grande porque tenemos que dejar de hacer cosas que nos salen intuitivamente, que es ver a los seres queridos, tomar mate y darnos un beso. Pero el mundo ya lleva un año así”, indicó Carla Vizzotti. Para finalizar, dijo que lo que le genera preocupación “es que la gente vea el hemisferio norte pensando que estamos en esa situación, cuando todavía nos faltan junio y julio, todo el invierno”.

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