El padre de Britney Spears decidió renunciar a ser su tutor. Las redes sociales explotaron con la noticia

No cabe duda, este es un día histórico y sin precedentes para Britney Spears. Después de 13 años de haberse mantenido bajo la supervisión legal de su padre, la cantante pop recuperará su libertad y poder de decisión, ya que su progenitor anunció en las últimas horas que decidió renunciar a ser su tutor legal

Jamie Spears se hizo del control de la vida de Britney desde 2008. La figura legal que impuso sobre ella, conocida como “Tutelaje”, tuvo en sus inicios el objetivo de proteger a su hija y a su patrimonio, luego de que la cantante atravesará problemas de adicción e inestabilidad psicológica, que devinieron en episodios de comportamiento violento. 

Sin embargo, con el correr de los años, el tutelaje fue cobrando nuevas dimensiones que ya nada parecían tener que ver con salvaguardar la integridad física y mental de Spears. Desde obligarla a consumir antidepresivos y otros fármacos, a intimar a la cantante a llevar un dispositivo anticonceptivo constantemente y controlar aparición pública reunión social que la artista tuvo en estos años, Britney fue perdiendo de manera escalonada cada una de sus libertades y posibilidades como mujer adulta. 

Luego de haber iniciado una intensa batalla judicial -en cuyas audiencias la artista compartió testimonios desgarradores sobre su situación- contra Jamie Spears y sus colaboradores para recuperar su libertad, el padre decidió finalmente dar un paso al costado en su rol como tutor. La decisión fue ampliamente celebrada por el equipo de abogados que atendió el caso de la cantante.

"Celebramos que el señor Spears y su abogado hayan admitido en una declaración que debe dejar su puesto", dijo Mathew Rosengart, representante legal en un comunicado. En esa misma línea también reconoció que la decisión implicó: "Una gran victoria para Britney Spears y otro paso para hacer justicia".

Mientras, tantos los fans que la intérprete cosecha en todo el mundo, se hicieron eco de la noticia en redes sociales y explotaron de gusto. En cuestión de pocos minutos, Instagram y Facebook fueron inundados con mensajes que contenían el hashtag “Free Britney”. De momento, la artista no ha expresado ninguna opinión ante el hecho, aunque no podemos estar más felices por su nuevo comienzo. Hubo justicia.