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El boom de las estafas en Salta: el ardid delictivo que se puso de moda entre los sinvergüenzas

Una impresionante cantidad de vecinos ya lo denunciaron

El boom de las estafas en Salta: el ardid delictivo que se puso de moda entre los sinvergüenzas
miércoles 03 de noviembre de 2021

SALTA (Redacción Voces Críticas) Desde que se desató la pandemia de coronavirus, estafas de todo tipo pudieron ser observadas llevándose a cabo en Salta: desde mentiras con la acreditación del Ingreso Familiar de Emergencia, hasta el "cuento del tío" que les hacen a los adultos mayores sobre supuestos bonos para jubilados.

Es en medio de este contexto, que durante este último tiempo un flamante ardid delictivo se puso de moda entre los sinvergüenzas y oportunistas, quienes se aprovechan de los salteños más desprevenidos y vulnerables para robarles todo su dinero sin siquiera estar presentes físicamente ni mucho menos recurrir a amenazas contra sus víctimas.

El ardid delictivo

Hace varias semanas que se vienen denunciando públicamente a través de las redes sociales este nuevo tipo de estafa, el cual parecería que realmente funciona para los delincuentes, ya que se volvieron reiterativos a pesar de que cada día hay menos personas que caen en sus mentiras -por fortuna- y no se dejan engañar.

El modus operandi es simple. Por lo general suelen atacar a personas que se encuentran vendiendo un producto o servicio, casi siempre emprendedores o comerciantes. Los estafadores se comunican con ellos para hacerse pasar por clientes, ya sea a través de WhatsApp o llamada y una vez que aceptan el trato con la víctima dan el golpe.

Supongamos que la víctima vende muebles por el precio de 5.000 pesos, los estafadores le solicitan pagar por transferencia bancaria por lo cual le solicitan el número de CBU a la persona que quieren defraudar. Es ahí que los delincuentes envían la imagen de un falso comprobante de transferencia que muestra que en vez de enviar los 5.000 pesos que vale el producto, transfirieron 50.000 pesos "por error".

Ahí es cuando comienza la actuación de los malhechores que piden por favor y mediante el llanto convencen a sus víctimas para que se les "devuelva" los 45.000 pesos de más que mandaron "sin querer", cuando en realidad jamás transfirieron ni un solo peso a la cuenta del estafado.

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