Inesperado percance de la princesa Charlotte en la Abadía de Westminster: quedó todo registrado

La Abadía de Westminster reunió este 6 de mayo a toda la Familia Real británica y sus pares. los pequeños del clan, los príncipes George y Louis y también la princesa Charlotte, han logrado captar mucho la atención en el gran día de su abuelo, el rey Carlos III. Sucede que los tres son una total ternura y el público en general quería verlos.

Esto se debe a que los looks que podían utilizar causaban intriga y también porque tienen personalidades únicas que los hacen encantadores. La princesa Charlotte ocupó un puesto en la primera fila, junto a Kate Middleton y el príncipe Guillermo. Por supuesto, junto a ella se pudo ver al pequeño Louis.

Mientras que George, el mayor, era el paje de honor de su abuelo y se ubicó junto a los otros niños elegidos para este rol. Y es que debían llevar la túnica del monarca tanto al ingreso como a la salida de la coronación. En todo momento se vio a la heredera de Kate muy atenta a lo que ocurría.

Y por supuesto, como ya tiene ocho años, no hizo tantas "locuras" o "travesuras" como Louis, quien bostezaba y hasta hizo gesto en el palco real. Informa Voces Críticas. Más allá de eso, no deja de ser una niña y a causa de la ubicación privilegiada que poseía en la Abadía, las cámaras capturaron una situación inesperada.

¿Qué fue lo que ocurrió? Hay una postal de la princesa Charlotte hurgándose la nariz. Seguramente la hija de Guillermo nunca pensó que eso podía notarse cuando la verdadera atención tenía que estar tanto en el hijo de Isabel II, como en Camila Parker, quien tuvo también su propia ceremonia, pero más sencilla que la del rey.

¿Le dirán algo sus padres a causa de este hecho o consideran que es algo que por ser tan solo una niña de ocho años, puede pasar y no es tan grave? Hay que tener en cuenta que tanto ellos como los demás retoños nacidos en familias reales, son educados desde pequeños para cumplir con ciertas normas, reglas y protocolos.