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Secreto real: tras mudarse a su nuevo hogar, Kate y Guillermo descubren este oscuro misterio

La casa brinda un estilo del siglo XIX pero ha sido remodelada para hacerla más cómoda

Secreto real: tras mudarse a su nuevo hogar, Kate y Guillermo descubren este oscuro misterio

Kate Middleton y William, junto con sus hijos, residen en Adelaide Cottage, ubicada en los terrenos de Windsor Great Park. Esta propiedad de cuatro dormitorios fue construida en 1831 por Sir Jeffrey Wyattville como una casa de té para la reina Adelaida. Sin embargo, detrás de esta encantadora mansión se oculta un escándalo.

La cabaña fue encargada por el rey Guillermo IV para su esposa en 1831 y se dice que se construyó sobre una estructura del siglo XVII. Según The Gardens and Parks of Windsor, los escritos de la época describen el refugio original como "una habitación romántica bajo un banco empinado" que cautivó a la Reina.

Peter Townsend, escudero del rey, fue uno de los primeros residentes de esta casa. En sus memorias, tituladas "El tiempo y el azar", Townsend escribió: "En la primavera de 1945, con nuestro segundo hijo en camino, el rey propuso que nos mudáramos a una pequeña casa, Adelaide Cottage, en el parque del castillo de Windsor. Fue un gesto generoso por el cual me sentí profundamente agradecido, a pesar de las limitadas comodidades de la casa".

Adelaide Cottage fue escenario de un escándalo real en las décadas de 1940 y 1950, cuando Peter y Rosemary Townsend vivían allí. Él era el escudero personal del rey Jorge VI y la princesa Margarita, quien era quince años menor que él, se enamoró de él. El romance entre Townsend y Margarita, que no era tan secreto, salió a la luz durante la Coronación de la Reina en 1953. Se cree que comenzó mucho antes de que los Townsend se divorciaran en 1952, y este escándalo se presenta en la serie de Netflix, "The Crown".

La casa, con una fachada de estuco, cuenta con dos amplias habitaciones, ventanas francesas, varias chimeneas, una terraza cubierta, una puerta cochera y detalles en molduras de pan de jengibre que se conservan hasta el día de hoy. Aunque se renovó en 2015, la familia real decidió preservar el porche delantero original del siglo XIX y los hermosos jardines que tienen casi 200 años. La residencia de alta seguridad, que cuenta con una puerta de seguridad separada, ofrece cuatro dormitorios, una sala de descanso para la Reina, una habitación para el servicio y muebles de la antigua casa de campo real. Informa Voces Críticas.

El interior ha sido amueblado y decorado con elementos de la "Logia Real". Según el periódico, "no tiene el esplendor ostentoso característico de los palacios, pero sí posee la pintoresca elegancia del estilo arquitectónico doméstico de la antigua escuela inglesa". La cabaña original se encuentra en el centro de la propiedad, con una extensión lateral considerable que se fotografió posteriormente en 1900. Esta extensión, con la fecha de 1831 y las iniciales de la reina Adelaida, incluye un segundo piso, cuatro imponentes torres de chimenea, un vestíbulo de entrada y una elegante puerta cochera que aún se conserva en la actualidad.

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