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Recuerdos en el fondo del mar
Pérdida real: esto le sucede al yate donde Lady Di pasó sus últimas vacaciones con Dodi Al-Fayed
Esta embarcación guardará recuerdos de los días felices de la princesa del pueblo y el empresario
A punto de cumplirse el 26º aniversario de la trágica muerte de Diana de Gales en un accidente de tráfico en París, se ha conocido un nuevo suceso relacionado con su pasado. El yate en el que la Princesa y Dodi Al-Fayed pasaron sus últimas vacaciones juntos se ha hundido en el mar Mediterráneo tras colisionar con un objeto desconocido cerca de Beaulieu-sur-Mer, en las cercanías de Niza, Francia.
El naufragio tuvo lugar el pasado sábado, y siete personas fueron rescatadas de la embarcación después del accidente. Lamentablemente, el yate terminó sumergido a una profundidad de casi 2.500 metros, según información proporcionada por la Policía Local.
Antes de la tragedia, el capitán del Cujo, nombre del barco, emitió una señal de emergencia, informando sobre el hundimiento debido a una fuga. Los servicios de rescate de Antibes acudieron rápidamente al lugar y lograron poner a salvo a todos los pasajeros, incluyendo al propietario de origen italiano. Sin embargo, no pudieron evitar que la embarcación se hundiera.
El Cujo tuvo un papel significativo en la vida de Diana de Gales en la década de los años noventa, ya que era propiedad de su pareja en ese entonces, Dodi Al-Fayed. Ambos disfrutaron paseos náuticos en esa embarcación a diferentes lugares del Mediterraneo.
Dodi invirtió una gran suma de dinero para acondicionar el yate, y se han inmortalizado imágenes de la pareja en la cubierta de la embarcación. Ese fatídico verano de 1997, Diana también fue vista en el Sokar, antes conocido como Jonikal, otro yate que pertenecía a Mohamed Al-Fayed, padre de Dodi. Informa Voces Críticas.
La embarcación hundida fue construida en Italia en 1972 por el empresario John von Neumann, quien encargó al astillero Baglietto que le proporcionara el yate a motor más rápido del mundo. Luego, fue adquirida por el hijo de Adnan Khashoggi, quien a su vez se la vendió a su primo Dodi Al-Fayed. Tras la muerte de Diana y Dodi, el estado del Cujo se fue deteriorando y fue dado de baja en 1999 hasta que fue adquirido a un precio asequible en 2020.
