Descubrí las cosas que más detestan los perros de sus dueños: entenderás muchas cosas

En el complejo mundo de la relación entre canes y seres humanos, a menudo se dan cabida, inadvertidamente, a situaciones de malentendido. Es crucial adentrarse en la comprensión de la mente canina, sus necesidades tanto físicas como mentales, y adquirir conocimiento sobre lo que les incomoda. Expertos en el ámbito canino, como el portal "Experto Animal," nos iluminan con diez claves que, al interiorizarlas, nos conducirán a potenciar nuestra conexión con nuestros entrañables compañeros de cuatro patas. Acá enumeramos algunas de esas situaciones que debemos comprender para que nuestra mascota esté cómoda:

1. Minimiza la exposición de tu perro a sonidos y olores intensos para prevenir malestares.

La agudeza auditiva y olfativa de los canes les permite detectar estímulos sonoros y aromáticos que pasan inadvertidos para nosotros. Por ello, resulta imperativo reducir al mínimo su contacto con ruidos y fragancias fuertes, con el propósito de evitar incomodidades y temores innecesarios.

2. Opta por una comunicación basada en gestos y comandos precisos para sortear confusiones.

Una excesiva palabrería dirigida a tu can, desprovista de gestos y directrices inequívocas, puede desembocar en estados de confusión y ansiedad. Los perros interpretan nuestras emociones a través de nuestra comunicación no verbal y el tono de voz. Por tanto, decantarse por gestos y comandos concisos, que han sido incorporados desde su etapa de cachorros, simplifica la fluidez comunicativa.

3. Encauza los errores de forma comprensible y elude la propagación de energía negativa.

Dado que los canes captan nuestras emociones, es sabio abstenerse de regañarlos sin justificación. La corrección ha de ser realizada de manera compasiva, y la vibración negativa, evitada, con miras a fortificar el vínculo.

4. Establece un marco estructural y una rutina que fomente la sensación de seguridad en tu perro.

La necesidad de estructura y rutina es innata en los canes, pues esto les brinda un entorno seguro y equilibrado. La carencia de un liderazgo definido y una instrucción elemental puede derivar en inseguridad y perplejidad. Cimentar un marco estructural que abarque desde la jerarquía en el hogar hasta las prácticas diarias constituye un pilar fundamental para su bienestar emocional y un desarrollo saludable.

5. Abstente de gestos invasivos y busca una comunicación caracterizada por el respeto.

La adopción de actitudes invasivas, tales como el fijar la mirada en los ojos del perro, sujetarlos de la cara o acariciarles la cabeza con palmaditas, puede engendrar malestar y ansiedad. La aproximación lateral, permitiéndoles olfatearnos, junto a una interacción amigable y respetuosa, resulta la vía a seguir.

6. Respeta las preferencias de tu can en lo referente a las muestras de cariño.

Los abrazos y besos excesivos pueden generar incomodidad en los canes, ya que interpretan estos gestos de forma disímil a nosotros. Respetar sus preferencias y estar alerta a las señales de malestar que puedan manifestar, se erige como actitud imperante.

7. Realiza paseos relajados y brinda la oportunidad a tu perro de explorar su entorno.

Los paseos representan instantes de deleite y descubrimiento para los canes. Es menester evitar la tensión en la correa y optar por una marcha sosegada. Se ha de permitir que interactúen con su entorno, lo husmeen, socialicen y jueguen durante los paseos.

8. Evita la indumentaria innecesaria para tu perro.

Vestir a los canes con ropajes desprovistos de funcionalidad o que tengan un carácter meramente decorativo puede tornarse molesto para ellos. Conviene reservar la vestimenta para situaciones de utilidad práctica. Informa Voces Críticas.

9. No exageres en el aseo y respeta sus necesidades inherentes.

Un exceso de aseo podría perturbar el equilibrio natural de la piel y la esencia corporal de los canes. Se recomienda respetar sus instintos olfativos y necesidades de higiene propia, evitando la aplicación de productos aromáticos.

10. Procura un contacto y estímulo constantes para contrarrestar el aburrimiento y la sensación de soledad.

La interacción constante y el estímulo continuo son esenciales para el bienestar canino. La monotonía y el aislamiento tienen el potencial de afectar su salud emocional. Dedicar tiempo a juegos, entrenamiento y atención resulta crucial para mantener su felicidad y satisfacción. Evitar abandonarlos durante períodos prolongados ayuda a prevenir la ansiedad por separación.