Una mujer denunció que le habrían incendiado la casa por negarse a cortar la ruta

SALTA (Redacción Voces Críticas) Liliana Rojas, una residente humilde de General Mosconi, se encuentra en una situación angustiosa después de que le incendiaron la  casa de manera intencional. A pesar del trauma que experimenta, Rojas afirma que sabe quién es el responsable del incendio, ya que esta persona previamente la había amenazado cuando se retiró del corte que se llevaba a cabo en la ruta 34.

Según Rojas, el cacique de la comunidad wichi, Rodolfo Arias, la amenazó en la mañana del domingo, instándola a regresar al corte de ruta y a firmar un nuevo petitorio para continuar la protesta. Ella se negó y se fue a Tartagal con su familia, cerca de las 12 de la noche la policía la llamó indicándole que su casa se estaba quemando.

El ataque no solo dejó a Liliana sin hogar, sino también a su esposo y sus cuatro hijos. Perdieron todas sus posesiones, incluyendo un colchón sommier, un congelador, una nevera, un sistema de sonido y toda su ropa. Afortunadamente, no estaban en la casa en el momento del incendio.

Liliana y su familia son personas trabajadoras que construyeron su modesta vivienda con esfuerzo propio y la ayuda de su familia. Ahora, se encuentran en una situación desesperada, perdiendo todo lo que tenían. Informa Voces Críticas.

Este grave incidente ocurrió después de un bloqueo de carretera que llevaron a cabo las comunidades originarias wichi en el municipio de Mosconi, cerca de la Ruta Nacional 34. Durante el bloqueo, se logró que les entregaran tanques de agua y alimentos, por esa razón Liliana se retiró, sin embargo, algunos miembros querían quedarse para exigir más cosas, pero ella se negó. Esto generó descontento entre algunos miembros de la comunidad wichi, y por su negativa habrían terminado incendiando su hogar.

La mujer denunció que los encargados de los cortes de ruta no se conforman con las cosas que les den, ya que ellos van a seguir exigiendo más, debido a que todo lo que reciben lo venden. Liliana explicó que incluso los bolsones con alimentos son vendidos “Ellos quieren que les den cosas para venderlas y no para usarlas o alimentar a sus familias”, indicó.

Liliana Rojas está angustiada y desprotegida, temiendo represalias por parte de quienes quemaron su hogar. Ha solicitado la ayuda a las autoridades y a la comunidad para reconstruir su vida después de este trágico suceso.