La princesa Leonor provoca la furia de sus guardaespaldas con este insólito comportamiento

La princesa Leonor está atravesando uno de los años más importantes de su vida, debido a que cada vez asume más responsabilidades dentro de la realeza de España. Sin embargo, la hija mayor de Felipe VI y Letizia también está aprovechando esta etapa para alcanzar su libertad, algo que le da un extenuante trabajo a sus escoltas.

Según informó la prensa española, la princesa Leonor está muy a gusto con la vida que lleva en Zaragoza debido a que tiene más libertad que nunca. Pese a que durante la semana se mantiene bajo la vigilancia de las autoridades militares de su academia, el fin de semana aprovecha el tiempo para salir con amigos y disfrutar de la noche.



De hecho, el último fin de semana, la princesa Leonor se tomó un descanso y salió a festejar con sus compañeros su nuevo triunfo: el cambio de curso. Pese a que la reina Letizia y el rey Felipe VI se encontraban en Zaragoza, su hija mayor decidió planificar una gran salida y aprovechar la época festiva de la ciudad.

Esta nueva vida solo ha traído más trabajo para los escoltas de la futura reina de España, quienes no deben perderla de vista. Entre las extenuantes tareas que tiene el equipo de seguridad de Leonor, deben encargarse de que la princesa no sea fotografiada y de que no tenga una conducta inapropiada. Informa Voces Críticas



Sin lugar a dudas, esto implica un gran desafío para los escoltas reales de la princesa Leonor debido a que es el gran centro de atención de Zaragoza y nadie quiere perderse la oportunidad de hablar con ella. Cada vez que sale de noche, la hija de la reina Letizia debe lidiar con personas que le hacen preguntas sobre su vida privada o con fanáticos que desean una foto junto a ella.

Teniendo en cuenta que la princesa Leonor debe cuidar su imagen, los escoltas deben procurar que las personas a su alrededor no logren acceder a ella. Además de cuidar su intimidad y su vida privada, el equipo de seguridad de la joven monarca tiene el trabajo de impedir que la prensa tome fotos comprometedoras de la futura reina de España, que puedan perjudicar su impecable camino hacia el trono.