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El desafío de Javier Milei: repetir el batacazo de 2019 de Gustavo Sáenz para ganar en primera vuelta

Javier Milei requiere emular el éxito de Gustavo Sáenz en 2019, un aumento notorio en las elecciones generales para acceder a la presidencia

El desafío de Javier Milei: repetir el batacazo de 2019 de Gustavo Sáenz para ganar en primera vuelta
sábado 21 de octubre de 2023

SALTA (Redacción Voces Críticas)  ¿Puede Javier Milei lograr lo que Gustavo Sáenz alcanzó? es la pregunta que ronda en medio de las elecciones generales de este 2023. A pesar de su discurso apasionado y la confianza proyectada en el Movistar Arena, las cifras y la historia electoral sugieren un panorama desafiante para el candidato libertario.

Las PASO de agosto fueron testigo de sorpresas, cuando el movimiento libertario sacudió el tablero político y desafió las expectativas de las encuestas, que no consideraban a Javier Milei entre los más votados y mucho menos, un posible ganador.



En las últimas tres semanas, se han conocido 23 encuestas sobre los resultados de las próximas elecciones. A pesar de que Milei lidera en la mayoría de ellas, ninguna lo coloca por encima del umbral constitucional que le permitiría ganar en primera vuelta sin necesidad de balotaje.

Más allá de las encuestas, un análisis de elecciones anteriores bajo el sistema de las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) muestra que es raro que el ganador de las primarias experimente un crecimiento significativo en las elecciones generales. Por lo general, los resultados de las primarias se mantienen como un techo y un piso en las generales, y los cambios suelen ser marginales.

En las PASO de agosto, Milei obtuvo el 31,58% de los votos positivos, lo que significa que necesita aumentar su base de votantes en al menos 8,42 puntos porcentuales para alcanzar el 40% requerido para ganar en primera vuelta. Para no depender de otros candidatos, necesitaría el 45%, entonces son 13,42 puntos los que debe aumentar respecto de las PASO.

Este desafío que busca Milei es más que significativo, si se analizan los procesos electorales de las 24 provincias que se rigieron por el sistema de las PASO,  sumado al de las tres elecciones presidenciales, las 25 elecciones de gobernadores y los comicios legislativos nacionales de medio término muestra que solo en tres ocasiones el partido que obtuvo la mayoría de votos en las primarias aumentó su porcentaje en las elecciones generales en 9 puntos o más.

Si bien ganar en las primarias se asocia generalmente con un favoritismo que se mantiene en las elecciones generales, los cambios drásticos son raros. En el 52% de los casos, el partido que ganó en las PASO redujo su porcentaje de votos en las generales. En el 41% de las elecciones, el partido ganador obtuvo un porcentaje en las generales que variaba en un rango de +/- 3 puntos porcentuales.

 

El caso extraordinario de Gustavo Sáenz en Salta

 

En la historia electoral argentina, rara vez se ha observado un salto significativo en el apoyo de un candidato, similar al que Javier Milei necesita para ganar en las elecciones de mañana. El único ejemplo de esto ocurrió en 2019 con Gustavo Sáenz, hoy Gobernador de Salta, quien aumentó su respaldo del 42.8% al 53.6%.

Es decir que Saénz tuvo un incremento de 10.8 puntos porcentuales aquí en Salta, entre dos elecciones sucesivas. Se trató de un escenario excepcional en el que, en las dos etapas de las elecciones, Alberto Fernández ganó y finalmente se convirtió en presidente. Además, el frente kirchnerista que estaba compitiendo contra Sáenz se dividió.

En comparación, en la mayoría de las provincias, las oscilaciones en el apoyo electoral entre elecciones con una oferta política similar suelen ser menos marcadas. En el mismo año de esas elecciones, tres gobernadores experimentaron situaciones similares a una segunda vuelta electoral. Por ejemplo, Maximiliano Pullaro, quien ganó en Santa Fe, vio una disminución en su apoyo del 63.1% en las primarias (suma de Juntos por el Cambio) al 58.5% en las elecciones generales.

El radical Leandro Zdero ganó en Chaco en la primera vuelta con el 46.2%, aproximadamente 4 puntos más que en las primarias, a pesar de que la distancia con su rival, Jorge Capitanich, se redujo. Por último, Alfredo Cornejo se impuso en Mendoza en las elecciones generales, pero obtuvo casi 10 puntos menos que la suma total de votos de su espacio político en las primarias.

En el repaso de situaciones también se analizaron las elecciones legislativas nacionales de 2013, 2017 y 2021, excluyendo las de 2011, 2015 y 2019 al coincidir con las presidenciales. En general, los cambios drásticos a favor del ganador de las PASO son raros en elecciones legislativas.

En 2013, en la elección de diputados nacionales por Buenos Aires, Sergio Massa sorprendió al kirchnerismo gobernante al aumentar su apoyo del 36.8% en las PASO al 43.9% en las elecciones generales. En 2017, durante el gobierno de Macri, Cristina Kirchner aumentó su respaldo en las primarias, pero finalmente Esteban Bullrich la superó en las generales para obtener las dos bancas del Senado.

En 2021, en la provincia de Buenos Aires, la oposición ganó las PASO con un 39.8% de apoyo y una ventaja de cuatro puntos. En las elecciones generales, su porcentaje se mantuvo similar, pero el oficialismo logró un aumento significativo y estuvo cerca de ganar.

En tan solo dos ocasiones, un candidato que ganó las PASO experimentó un aumento de más de 9 puntos en las elecciones nacionales. En 2013, en Chaco, Jorge Capitanich logró este impresionante aumento en su respaldo después de una campaña intensa. En las PASO, su frente obtuvo casi el 50% de los votos, y finalmente aumentó su apoyo en 11 puntos, siendo uno de los triunfadores en un día desafiante para el kirchnerismo. Como resultado de este éxito, Cristina Kirchner lo nombró jefe de Gabinete de ministros en los días posteriores.

El otro caso fue en Jujuy en 2017, Gerardo Morales, el radical, aprovechó para derrotar al peronismo provincial, que se dividió en las PASO para el Senado. Entre las primarias y las generales, los perdedores de la oposición se unieron al gobernador, resultando en una victoria abrumadora de 15,4 puntos más. Este es el único caso en el que se superó la gran diferencia que Milei necesita para ganar en primera vuelta. Informa Voces Críticas.

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