Tras rumores de infidelidad, así fue el inesperado reencuentro de Federico y Mary de Dinamarca

Las especulaciones sobre la discreción de la princesa Mary de Dinamarca desde las controversiales imágenes de su esposo, el príncipe Federico, en Madrid con Genoveva Casanova, han aumentado ante su ausencia virtual desde su llegada a Sídney por una visita familiar el pasado 6 de diciembre, junto a sus hijos mellizos, Vincent y Josephine, pero sin el heredero al trono danés.

Sin embargo, finalmente se ha producido el ansiado reencuentro de la pareja real. Mary Donaldson, al llegar a su tierra natal, ha mantenido un perfil discreto, alejándose del foco mediático. A través de las redes sociales de su fundación, solo se ha revelado su estado actual mediante dos publicaciones: una destacando la importancia del amor, cuidado y cercanía, y otra anunciando una donación especial de la Fundación Mary al centro social Offside's Social Gardens.

En abril pasado, fuera del escrutinio mediático actual, la princesa Mary de Dinamarca realizó un viaje en solitario por el Pacífico Sur, concluyendo su visita oficial en Australia después de diez años. Durante ese viaje, se centró en temas de sostenibilidad y la transición verde del país.

Tras casi diez días separados, el príncipe Federico, quien asistió a la reunión COP28 en Dubái, y su hija Isabella fueron vistos aterrizando en Queenstown, Nueva Zelanda. Aunque se desconoce la razón del destino, se especula que podría estar relacionado con la residencia del padre de Mary, John Donaldson. Mientras tanto, el príncipe Christian no se unió a ellos debido a la preparación de sus exámenes. Informa Voces Críticas.

La polémica en torno a las imágenes de Federico y Genoveva Casanova en Madrid persiste, y la princesa Mary, tras una "vacación anticipada de Navidad", se reencuentra con su esposo en Australia, dando indicios de superar los desafíos públicos y mantener la unidad familiar. Mientras tanto, Genoveva Casanova disfruta de su tiempo en Andorra, retomando su vida habitual tras el período de refugio en San Sebastián. La tormenta mediática aún no ha cesado, y numerosas incógnitas permanecen sin resolver.