Entierro y novedades del caso Neuss: así fueron los dramáticos momentos previos al femicidio y suicidio

ARGENTINA (Redacción Voces Críticas) El fin de semana, la noticia de que el empresario Jorge Neuss había asesinado a su esposa y luego se quitó la vida, acaparó los medios de comunicación y se tejieron varias hipótesis. Sin embargo, con el correr de las horas, la Justicia fue esclareciendo algunas incógnitas.

Tal como informaron en Informados de Todo, en base a las testimoniales se comprobó que "alguien había cerrado la puerta con llave desde adentro del dormitorio". Al parecer, el empresario argentino estaba preparando la situación. Sin embargo, las personas que se encontraban en la casa, negaron escuchar gritos o peleas que haga suponer la existencia de una discusión.

De acuerdo con la reconstrucción física del hecho, "Silvia Saravia se encontraba en el baño de la recámara". En ese momento, habría ingresado Jorge Neuss y todo indica que la "toma del pelo y le dispara". Según el periodista, "no se alcanza a determinar si apoya el caño sobre la sien o si lo hace a escasa distancia".

En esa misma línea, el comunicador revela que "hay un orificio de entrada de la bala sobre el lado derecho de la sien de Silvia y un orificio de salida. Incluso la bala impacta en uno de los dedos de Neuss desde donde tenía a su esposa". Acto seguido, el femicida "se retira del baño y a la altura de lo que sería la puerta, se efectúa el disparo él".

Este martes, se entregaron los cuerpos a la familia y se improvisó una ceremonia en el cementerio de Recoleta, por la gran cantidad de gente (cerca de 200 personas) que llegó para despedirse de Jorge Neuss y su esposa. Lo más llamativo de todo, es que colocaron una foto de los dos juntos y un cura dio la bendición.

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Otro dato que no pasó desapercibido, es que se montó una especie de vigilancia en el sector porque se juntaron las familias de ambos y temían una gresca. Pese a ello, se informó que las dos partes se resisten a tildar al millonario como un femicida, porque se amparan en los 50 años de matrimonio en que él, puertas afueras, era un marido ejemplar.