Crimen del turista francés: se conocieron las penas para los hermanos Cuevas

SALTA (Redacción Voces Críticas) Finalmente, este martes se conoció el veredicto por el crimen de Mathieu Pierre Martin,  un turista francés de 32 años que desapareció en agosto de 2018, cuando recorría el norte argentino como mochilero. Los principales sindicados como culpables del homicidio eran Juan y Froilán Cuevas, dos hermanos que residen en el paraje Huacaloma (Iruya), donde había sido visto por última vez.

En este sentido el Tribunal de la Sala VI de Juicio, condenó a 13 años de prisión a Juan Cuevas y determinó la absolución de su hermano Froilán, por el beneficio de la duda. Durante los alegatos, los fiscales penales Ramiro Ramos Ossorio y Pablo Rivero, solicitaron al Tribunal se aplique la pena de 20 años de prisión efectiva a Juan Cuevas y 12 años de prisión efectiva a Froilán Cuevas, como coautores del delito de homicidio simple.

Sin embargo, en su fallo, los jueces Guillermo Pereyra, Mónica Mukdsi y José Luis Riera condenaron a Juan Cuevas a la pena de 13 años de prisión efectiva como autor del delito de homicidio simple en perjuicio de Mathieu Martin y se dispuso además que se le extraiga material genético por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos. Froilán Cuevas fue absuelto por el beneficio de la duda y se ordenó además que se registre el fallecimiento de Mathieu Martin y se notifique a sus familiares.

La vida de los hermanos Cuevas

Los hermanos que fueron las últimas personas en ver con vida al turista, vivían en el paraje Huacaloma, en Iruya. “Cuando se buscaba a Martín los acusados primero dijeron que no lo habían visto y luego indicaron un supuesto recorrido que había hecho. O sea, no lo habían visto pero sabían el recorrido que hizo. Después un testigo contó que vio la carpa de Martin en la propiedad de los hermanos”, había relatado el fiscal Ramiro Ramos Ossorio.

Quien evidenció que ellos sí sabían lo que había pasado, era la hermana de los Cueva, quien recordó que una pareja suya también tuvo un "accidente" estando con uno de sus hermanos. Cayó por "el chorro" que es una cañada de 500 metros de profundidad “con paredes de laja”, “sedimentos que se mueven constantemente” y de “muy difícil acceso”, según describió el fiscal. Los hermanos eran conocidos allí por su vida rudimentaria y su apego al alcohol. Los lugareños contaban que cuando Juan se emborrachaba recordaba que había quemado las cosas del turista.