Increíble: un loro es el único testigo por un femicidio

SALTA.- (Redacción Voces Críticas). "Ay no, por favor soltame". Esta frase repitió constantemente un loro que fue testigo de un femicidio. Se trata de la muerte de Elizabeth Alejandra Toledo, de 47 años. Esta mujer convivía en un departamento de San Fernando, en la provincia de Buenos Aires junto a tres hombres. El asesinato ocurrió el 30 de diciembre de 2018. 

El ave es testigo por este brutal femicidio, donde la mujer también fue violada. El loro de color verde y estilo clásico, repite una frase que la víctima dijo antes de que la mataran: "ay no, por favor soltame". Por este hecho, ocurrido hace un año y medio atrás, dos hombres serán juzgados. Se trata de Miguel Saturnino "Mambo" Rolón (52) y, Jorge Raúl Álvarez (64), apodado como el "Tío Jorge".

El dato de que un loro fue testigo de este femicidio, fue aportado por un policía que estuvo en la escena del crimen y, que dijo que el animal repetía la frase mencionada. Esto pudo haber sido una de las frases que decía Elizabeth Toledo, mientras era atacada por sus asesinos. La mujer tenía un retraso madurativo. Los tres hombres que convivían con ella, la sometían a distintos maltratos, aunque nunca fueron denunciados. 

La fiscal Bibiana Santella, decidió incorporar la información brindada por el policía, donde un loro es el único testigo del asesinato y violación de esta mujer de San Fernando. El oficial, perteneciente ala comisaría de Virreyes, fue el encargado de preservar la escena del lugar sin modificaciones, hasta la llegada de personal científico. Se sorprendió cuando escuchó gritos que venía del interior del departamento, cuando en teoría, allí no había nadie. Ahí notó la presencia de un loro color verde en una jaula. 

Hay otra frase que habría dicho el loro testigo del crimen de Elizabeth Toledo, en otra oportunidad. Fue aportado por la dueña de un negocio, donde compraban el alimento para el ave. "¿Por qué me pegaste?", fueron las palabras que esta mujer escuchó decir al loro. Coincide con que en ese momento, la pareja de Elizabeth Toledo fue corrido de la vivienda porque la había agredido.