Comerciantes endeudados por el tarifazo de la luz ponen en duda su continuidad laboral

SALTA (Redacción Voces Críticas) La profunda crisis económica y social que está atravesando el país no da respiro. Las recientes autorizaciones que establecieron el incremento del valor de la tarifa de luz hicieron que las primeras facturas comiencen a llegar a manos de comerciantes y emprendedores. Ante la sorpresa de muchos, los incrementos en el valor pasaron a un 250% para los usuarios que tienen locales.

Tras conocerse esta escandalosa cifra en el pago del servicio eléctrico, muchos de ellos aseguraron que para abonarla deberán sobreendeudarse generando una línea de crédito que se le va a acoplar a la de la boleta que viene. Este círculo vicioso sólo no solo impacta en el bolsillo de los que día a día se las rebuscan para llevar un plato de comida a sus mesas, sino que también repercute a nivel emocional y, por ende, psicológico afectando esto en su salud mental.

La Secretaría de Energía de Nación había avalado un incremento de un 120%, sin embargo, también se le aplicó la suba del 6% del transporte a la electricidad sumado al 101,28% que el Ente Regulador de los Servicios Públicos de Salta le fijó a Edesa por la distribución. Además, se habían pautados incrementos en los montos en marzo y abril de un 11,84% pero fueron llevados a revisión por el Ente Regulador por un plazo de 120 días.

No obstante, desde el plano más tangible, son los trabajadores de los locales de productos y servicios los que deben afrontar no sólo con una deuda inescrupulosa con un servicio básico, sino que, además, las bajas en venta son un factor crucial para el ciclo de producción. Por tal motivo, se ven obligados a incrementar el precio de su mercadería para amortiguar el tarifazo, aunque se sabe a ciencia cierta que la mayoría de las personas han perdido el poder adquisitivo.

Al no contar con el dinero del que se disponía antes, los clientes ya no consumen y si no se consume, no hay ventas. Esta situación se está transformando de lo más dramática y angustiante ya que las boletas sin pagar de luz se siguen acumulando y los intereses por moras se van incrementando. A su vez, la incertidumbre y las dudas que genera esta crisis económica y social hacen que las personas no puedan vivir con la mente en paz, por lo que sus facultades psíquicas comienzan a ponerse en jaque hasta, incluso, poner en duda la moral de cada uno.

Finalmente, cabe destacar que a esta suba también hay que considerarse la del gas que comenzó a aplicarse hace ya unos días. El aumento del 300% representa un verdadero cimbronazo para los usuarios que, desconcertados y abatidos, no tienen más remedio que pagara. Informa Voces Críticas.