Horror en una escuela de La Candelaria: detienen a un docente acusado de violar a dos alumnas

SALTA (Redacción VOCES CRÍTICAS).- La denuncia por abuso sexual que radicaron dos madres sacude por estas horas a La Candelaria, la localidad en donde fue detenido el docente de una escuela. El profesor, de 47 años de edad, quedó detenido por orden del fiscal penal de Rosario de la Frontera, quien lo imputó por los delitos de abuso sexual simple y agravado.

Según relataron las madres de las dos alumnas abusadas por el profesor, los hechos ocurrieron en reiteradas oportunidades en la escuela de La Candelaria. Una de las adolescentes dijo haber sufrido violaciones por parte del docente entre los 13 y los 16 años. Al drama se suma que el agresor es vecino de las familias que lo denunciaron. Conmocionadas, las mujeres pidieron justicia por la "pesadilla" que sufrieron las estudiantes que sufrieron las vejaciones mientras cursaban la secundaria.  

"En marzo del año pasado, realicé una denuncia porque este profesor le hizo muchas señas obscenas a mi hija menor, sin contar lo que ya había ocurrido con mi otra hija", afirmó una de las madres que rompió el silencio sobre los abusos ocurridos en La Candelaria. "Soy una mamá soltera, estoy sola y tengo mucho miedo porque estoy recibiendo amenazas", agregó la denunciante en la causa que está a cargo del fiscal penal de Rosario de la Frontera Oscar López Ibarra. 

La madre de una de las jóvenes manifestó que realizó dos denuncias contra el supuesto abusador y que sus hijas brindaron su testimonio en cámara Gesell debido a su corta edad. Según los testimonios, una de las víctimas en un momento no quiso seguir yendo al colegio, bajo la excusa de que no quería seguir estudiando. La razón era, en realidad, que el agresor la besaba y manoseaba cuando encontraba oportunidad. Luego de tres años de sufrir abusos, pudo romper el silencio y denunciarlo. 

“Mi hija ya tiene dieciséis años y desde los trece, la manoseó y acosó en primer, segundo y tercer año del colegio", describió la madre de la menor, quien sacó a su hija de la escuela de La Candelaria y ahora concurre a un establecimiento educativo de Rosario de la Frontera para permanecer alejada del agresor que vive en su mismo barrio.