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Martín Grande o el “Complejo de Napoleón”

La psicología explica bajo el nombre de “Complejo de Napoleón”, los problemas de inferioridad que provoca poseer una estatura corta, lo que en la jerga común se denomina “Ser petiso”

Martín Grande o el “Complejo de Napoleón”
jueves 20 de mayo de 2021

EDITORIAL (Por Franco Alvarado para Voces Críticas) La psicología explica bajo el nombre de “Complejo de Napoleón”, los problemas de inferioridad que provoca poseer una estatura corta, lo que en la jerga común se denomina “Ser petiso”.

Al fin de cuentas, todos, quien más, quien menos sobrelleva su complejo a espaldas, algunos con más disimulo que otros, pero ocurre que cuando el complejo se mezcla con la personalidad, el combo resulta explosivo. Sería el caso del periodista devenido en diputado nacional, Martín Grande, de ampulosas expresiones y poseedor de una elocuencia con la cual en ocasiones pretender causar humor cuando en realidad causa pavor.

En las últimas horas el dicho “cadete de los salteños”, una desafortunada expresión porque el hombre en cuatro años de mandato olvidó al parecer su función de chico de delíbery parlamentario calificando incluso entre los que menos esfuerzo parecen haber realizado, fue noticia tras agredir verbalmente a la fiscal penal de Derechos Humanos de Salta, Verónica Simesen de Bielke, tratándola con el poco decoroso calificativo de “atorranta”.

Pues bien, no pudo el hombre que alguna vez se deleitaba mojando remeras para transparentar adolescentes pechugonas, elegir palabra más inapropiada para dirigirse a una mujer, ya que en la jerga idiomática la definición de “atorranta” se aplica a lo “Que es ordinario o mediocre”, particularmente para descalificar a una hembra, verbigracia: "No quería ningún perro de raza, se conformaba con una perra atorranta".

Tal vez ocurra que Grande no conozca la etimología del término aplicado a la fiscal que alude a toda persona holgazana, vaga, perezosa, ociosa, haragana, floja, maula y gandul, ninguno de los cuales es de pensar, sean del agrado de la fiscal Simensen de Bielke.

Pero he aquí que mientras la prensa cascotea a Martín Grande quien muestra su lado más mísógino, alguien debe concurrir en defensa de tal esperpento, echando un manto de piedad y explicando que su reacción no debe tomarse como un acto con intención de agravio sino, como diría Adler, no el queso fundido sino el psicólogo austríaco, Alfred (que tampoco es el mayordomo de Batman), las personas que crecen entre personas más altas y más capaces que ellos desarrollan sentimientos de inferioridad. Ergo, el acto de Grande no es en realidad un insulto a la fiscal, sino una reacción propia de su condición de “sopeti”.

Lance Workman, explicó que este trastorno que anida en las personas bajas “especialmente en los hombres”, frente a mujeres más altas, tituladas y más capaces, los “torna más agresivos y de peor genio”.

Completa Workman, catedrático de la Universidad de Gales, diciendo que “estos individuos compensan la falta de estatura con una personalidad más fuerte

Finalmente, según comulgan con Workman otros estudiosos de este tema, el “Complejo de Napoleón” desata más los celos que el ser agresivo.

Toda esta explicación ha sido elaborada a fin de solidarizarnos con Martín Grande, cuestión que la fiscal Simensen de Bielke, tome como un atenuante el hecho que quien ella por un atacante es en realidad un sujeto envuelto en la contradicción entre su ser y su apellido, y que además, no ha sido su intención ofenderla sino su inconsciente que activó un mecanismo de defensa ante tanta belleza y autoridad.

Muy lejos nos hallamos de verter condenas ni adjetivaciones, sino que entendemos que el periodismo debe siempre ser aquella birome siempre dispuesta a dibujar un trazo que marque los límites de la estupidez, siempre a los fines de evitar un conflicto, claro está.

Por Franco Alvarado para Voces Críticas

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