El príncipe Andrés está deprimido y perdido: fue echado definitivamente del palacio por el rey Carlos III

En medio de los preparativos de Navidad, el rey Carlos III tenía planeado celebrar la fecha especial reunido junto a toda la familia real y evitar polémicas. Sin embargo, no parece que la reunión navideña vaya a estar exenta de tensiones.

Según han informado desde el medio británico "The Sun", el hijo de la reina Isabel II ha decidio que su hermano, el príncipe Andrés, no utilice más el Palacio de Buckingham para sus trabajos. 

En ese contexto, el rey Carlos cada vez lo aleja más de la familia real británica y da un paso más para finalmente terminar de expulsarlo de su puesto real y finalizar con el vínculo.

De esta manera, el hermano del rey Carlos no podrá usar la dirección para ninguna correspondencia futura. Además, los empleados del tercer hijo de la reina Isabel se enfrentan a quedarse sin trabajo. 

Según informó una fuente al diario, cualquier presencia del príncipe Andrés en el palacio ha "terminado oficialmente". Asimismo, sostuvo: "El rey lo ha dejado claro. Él no es un trabajador real. Está solo".

Esta decisión se da luego de que la reina cosorte, Camila Parker, reemplazara al príncipe Andrés en su puesto de coronel de la Guardia de Granaderos. El mismo rol real al que el hijo de Isabel II fue obligado a renunciar tras la desastroza entrevista que brindó en 'BBC Newsnight'.

En el año 2017, el príncipe Andrés había heredado el cargo de su difunto padre, el duque de Edimburgo. Tras el escándalo por el caso de Jeffrey Epstein, la reina Isabel II lo obligó a renunciar a sus deberes reales oficiales en 2019. 

Finalmente, a principios de este año, fue despojado del título de coronel de la Guardia de Granaderos, después de haber tomado la decisión de resolver una demanda civil con una de las víctimas de Epstein ofreciéndole dinero.

Todas las decisiones del rey Carlos fueron muy decepcionantes para Andrés, quien tenía la esperanza de volver a su vida anterior: "Andrés creía que había un camino de regreso, que de alguna manera podría rehabilitarse y desempeñar un papel dentro de la institución en el futuro".

Además, no se esperaba que el rey Carlos III le comunicara que sus días como miembro de la realeza habían terminado: "Salió de la reunión conmocionado. Todavía está en estado de shock. Está completamente perdido y muy deprimido".