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Benedicto VXI: la historia del Papa que tenía ocho doctorados y hablaba ocho idiomas

Falleció Benedicto XVI, a la edad de 95 años

Benedicto VXI: la historia del Papa que tenía ocho doctorados y hablaba ocho idiomas
sábado 31 de diciembre de 2022

MUNDO (Redacción Voces Críticas) La Iglesia católica lamenta el fallecimiento de Benedicto XVI, quien permaneció por 9 años y medio como máximo representante de la religión católica. Se puede decir, que su vida se caracterizó por la “fe”, teniendo en claro que quería abocarse al celibato desde muy joven.

Joseph Ratzinger nació el 16 de abril de 1927, en la localidad de Marktl am Inn, Alemania. Su nacimiento fue muy “especial”, puesto que cayó en Sábado Santo. Sus padres quisieron aprovechar lo que esta fecha representaba, e inmediatamente, lo bautizaron. 

Así el pontífice alemán creció en el seno de una familia muy creyente, que le inculcó grandes valores en torno a Dios. Sin embargo, la infancia de Joseph  no fue “color de rosas”. A los 14 años fue obligado, al igual que a muchos otros jóvenes de ese entonces, a alistarse a las Juventudes Hitlerianas.

Benedicto XVI conformó el ejército nazi por dos años, hasta que se dejó capturar por los vencedeores. Sin embargo, se ha mantenido firme en asegurar que jamás disparó, pese a conformar las filas y participar en la guerra. 

En 1951, a la edad de 24 años de edad, culminó sus estudios en Teología católica y Filosofía en la Academia Filosófica y Teológica Frisinga. Sin pensarlo dos veces, cumplió su sueño de ser sacerdote junto a su hermano mayor, Georg.

Sería él, quien lo acompañaría a lo largo de su travesía por el Vaticano, siendo su más grande sostén. La amistad entre ambos era tan grande que, incluso, pese a la compleja situación de Joseph Ratzinger en 2020, viajó a Alemania para despedirse de él. Haciendo uso de una silla de ruedas, se despidió de su hermano.

Joseph Ratzinger no sólo se caracterizó por su amor a Dios y a la doctrina de la Iglesia católica; era un amante de los libros, hasta el punto de tener ocho doctorados y ser capaz de hablar ocho idiomas. Podía comunicarse con total soltura por medio del alemán, italiano, español, francés, inglés y latín.

A su vez, podía leer en hebreo antiguo y griego. La música fue su otra gran pasión. Tocaba el piano, algo que no cambió pese a su avanzada edad. De hecho, protagonizaba pequeños conciertos durante su cumpleaños o el de su hermano Georg.

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