15.3ºc 
Nadie sabía estos datos
Los profundos secretos detrás de la admirable relación entre Isabel II y Felipe de Edimburgo: grandes sorpresas
Situaciones únicas para la Familia Real.
Una de las relaciones más consolidadas en el ámbito royal a través de los años fue la que establecieron la reina Isabel II y Felipe de Edimburgo, los padres de Carlos III.
El duque y la monarca estuvieron casados durante setenta y cuatro años, más allá que tuvieron múltiples diferencias sobre estilos de vida y tipos de crianza para sus hijos.
En esa línea, el príncipe del Reino Unido puso por delante de cualquier cuestión su amor por la madre de Carlos III, una mujer formidable y admirable en todo sentido.
Con relación a las discrepancias entre ambos, uno de los puntos en los que más diferencias tenía el royal con su mujer era por los animales, ya que no le gustaba tener perros ni tampoco que Isabel disfrute de las carreras de caballos.
La clave de la relación estuvo en la compañía de ambos para distintas situaciones. Mientras él la acompañaba a las carreras, ella dejaba que él disfrute de partidos de cricket, una de sus pasiones.
Otro de los grandes intereses por parte de Felipe de Edimburgo fueron los extraterrestes, por lo cual pasó casi setenta años investigando al respecto y hasta incluso llegó a confirmar la existencia de los mismos. Un gusto especial que tampoco influyó en la continuidad de una relación muy duradera.
