Pino... o Pinocho Paz Posse

SALTA (Por Franco Alvarado) Como es sabido las alimañas habitan en los albañales, en ese submundo que se mueve por debajo de los pies de los ciudadanos. Los bichos suelen tener una intensa vida social y son organizados a la hora de socavar y dañar la propiedad pública y privada, saliendo a la superficie cuando las condiciones atmosféricas o alguna necesidad los impulsa a exhibirse. Con algunos, ahora candidatos, parece ocurrir igual, ya que permanecieron ocultos de la vida pública durante los últimos años y ahora con la proximidad de las elecciones dejan "sus guaridas asquerosas", diría Eva Perón en aquel encendido discurso contra los que pretendìan manosear al peronismo, para salir a capturar recursos para volver a la oscuridad de sus madrigueras hasta la próxima oportunidad.

Oportunidad habla de oportunistas como el caso de "Pino" Paz Posse que parece haber visto en estas elecciones como tallar una moneda saliendo a la superficie a mostrarse como "lo nuevo en la politica; pero lo más escandaloso de esta "mise en scene" es su postura de censor denunciando la corrupción existente cuando es unos de los ex funcionarios que más explicaciones debería dar sobre su gestión.

Sabemos que las enfermedades mentales no tienen edad para hacerse presentes, especialmente aquellas patologías que alteran una buena sinapsis y evidentemente al "Pino" Paz Posse" le estarían haciendo cortocircuito las terminales cuando sin pudor alguno denuncia las fallas del gobierno provincial y del municipio de la Capital utilizando el consabido discurso barato, exitista y totalmente vacío de contenido. Obviamente el libretista del grupo debe ser un recomendado.

En este "stand up" titulado "Hago campaña y qué me importa", el "Pino" Paz Posse, interpreta en este el papel del "Hombre de la Máscara de Hierro", celebrada pieza literaria, desde cuyo personaje pontifica sobre los problemas sociales de la provincia prometiendo espejos de colores para los jóvenes mientras sonríe garantizando mejoras que durante el tiempo en que fue funcionario Salta no tuvo.

En su spot publicitario, mientras emerge cual gusano del cuerno (plaga del tabaco), el "Pino" enarbola la ya gastada frase "Vamos a trabajar con vos", una burda mentira ya que en la función pública nunca se lo vio trabajar y menos "con vos" que vas a continuar esperando que caiga el maná del Cielo, bueno en este caso la lluvia porque el hombre manejaba el agua de Salta.

El salteño mínimamente informado no puede menos que preguntarse cómo este individuo cuyos pergaminos laborales y/o cursados académicos no se conocen y según se escucha en los círculos allegados "es hombre de estar en pie antes de que cante el gallo...", porque dicen que todavía no llega a la casa.

Como una broma macabra el "Pino" Paz Posse les habla a los salteños del problema del agua -entre otros- cuando fue durante su gestión al frente de Aguas del Norte cuando se agudizó el problema porque no invirtieron ni siquiera en el cambio de una gomita de canilla, nada potable como el agua se hizo. De hecho, hoy algunos vecinos abren sus grifos y obtienen un lìquido parecido a una famosa bebida cola. Tal vez Paz Posse tenía la fórmula de ese líquido y la aplicó en las cisternas de Aguas del Norte, pero hoy luego de más de una década con él como encargado del agua de Salta, los ciudadanos no pueden ni siquiera tomar la que sale de las canillas porque en no pocos lugares se sabe -y lo dijo la propia empresa distribuidora en tiempos recientes- estaría contaminda.

En las zonas rurales, las escuelas piden donaciones de agua porque la poca que les sale contendría arsénico. En el colmo del delirio esa agua no se recomienda para plantas ni animales, pero parece que sí para los habitantes. Tal vez este muchacho sea socio de Bill Gates que junto a otros está empeñado en la reducción de humanos sobre la Tierra. La globalizaciòn ha llegado a Salta.

Dicen que entre beduinos no se pisan la túnica pero días pasados el "Pino" se trenzó con un antiguo "cumpa" de la gestión anterior, el hoy candidato a gobernador, Emiliano Estrada, a quien le reclamó primero de dónde había sacado el dinero para pagar su publicidad electoral en un partido de la Selección Nacional de Fútbol. En ese juego del Gran Bonete "Yo señor, no señor", Estrada ultimó al neotabacalero Paz Posse recordándole que cuando era gerente de Aguas del Norte puso carteles electorales suyos en esa Empresa a lo que el "Pino" se negó diciendo que jamás hubo cartelería suya en el lugar de trabajo. Puede ser, pero cualquiera recuerda las gigantografìas que contaminaban visualmente a Salta con su cara. ¿Las pagaba Paz Posse de su bolsillo o en vez de cambiar los cueritos de las canillas convertía ese dinero en publicidad?

A la fecha no se sabe a qué espacio realmente representa "Pino" Paz Posse que también pareciera ser un "emprendimiento privado". Inevitablemente surge entonces la pregunta ¿Quién o con quñe sufraga los gastos de campaña que son generosos en spots y viralizaciones en las redes sociales? ¿Serà acaso algún remanente del nunca rendido Fondo del Bicentenario?

Que la campaña política en Salta dista mucho de ser algo serio y organizado es un dato común a todos los espacios, pero este personaje se lleva la palma y en realidad más que postularse a un cargo político debiera anotarse en algún concurso literario de ciencia ficción, como Pinocho.