Inolvidable: así fue la primera aparición pública de Lady Di y el príncipe Carlos III antes de su matrimonio

En febrero de 1981, la reina Isabel II de Inglaterra y el príncipe Felipe de Edimburgo daban a conocer ante el mundo el compromiso oficial de su hijo mayor, el príncipe Carlos, con la queridísima princesa Diana de Gales, conocida cariñosamente por su familia y amigos como Lady Di.

42 años han pasado desde aquel histórico anuncio que cambiaría por completo la vida de la joven maestra de guardería, quien a sus 19 años, se convertiría en una de las figuras más icónicas de la Corona británica.

A propósito de esta fecha, esta semana se viralizaron las primeras fotografías que le fueron tomadas a la princesa Diana junto a su novio y futuro esposo -ahora rey de Inglaterra- en un exclusivo baile benéfico organizado en el Palacio Goldsmiths’ Hall de Londres. 

Aquella cálida noche de marzo, Lady Di, de 19 años, llegaba al salón ceremonial del Goldsmiths’ Hall de la mano de su prometido el príncipe Carlos, que en ese momento tenía 32 años. Lucía un sofisticado vestido de terciopelo negro en corte de princesa, con sobrios encajes del mismo color y aplicaciones de perlas en blanco. 

El precioso escote de su corsé era decorado con unos accesorios únicos: un collar plateado con piedrería brillante y unos aretes colgantes. Ambos hacían juego perfecto con su estilismo: sobrio, moderno y sofisticado.

La belleza de Diana Spencer cautivó por completo a todos los presentes en el salón, pero lo que más impresionó de la joven princesa fue su carisma y elocuencia a la hora de desenvolverse ante el público. Estas dos características serían las que más tarde la convertirían en una de las royals más famosas de los últimos tiempos.

Desde esa noche, la prensa británica no dejó de hablar sobre la futura consorte del rey de Inglaterra. Todas las rotativas de la Mancomunidad de Naciones hacían referencia a la belleza y el increíble carisma de derrochaba Lady Di, aunque su particular historia de amor con el príncipe Carlos rápidamente opacó todas las virtudes de Diana.

Una historia de amor destinada al fracaso

Cuando Diana y Carlos iniciaron su noviazgo, en marzo de 1981, el príncipe venía saliendo de una relación amorosa con Camila Parker Bowles, quien fuera su gran amor y con quien no pudo comprometerse debido a la oposición de su familia, especialmente la reina Isabel II. 

Carlos, que para la fecha era considerado como el soltero más codiciado del Reino Unido, nunca reconoció públicamente que estuviera enamorado de Diana. Todo lo contrario, cuando se le preguntaba sobre sus sentimientos por la princesa, él siempre respondía con ambigüedad y extrema solemnidad. 

Incluso, durante la primera entrevista que la pareja ofreció a la prensa, el entonces príncipe de Gales reaccionó de una manera muy particular a la hora de responder sobre sus sentimientos hacia Diana Spencer. 

“Se les ve felices por su compromiso, seguro están muy enamorados”, preguntó uno de los periodistas presentes en el Palacio de Buckingham durante la entrevista. “Claro que sí, muy enamorados”, respondió tímidamente Lady Di, que entonces era una completa desconocida para los medios. Mientras que el hijo mayor de la reina Isabel agregó con ambigüedad: “lo que sea que signifique para una persona estar enamorados”. 

Su respuesta, carente de emoción y entusiasmo, abrió un arduo debate en los medios sobre el supuesto “casamiento por obligación” de Carlos y Diana, y dejó entrever que los sentimientos del príncipe no eran tan fuertes como los de su prometida. 

Muchos medios sostienen que, si Diana Spencer hubiese prestado atención a este comentario y hubiera disuelto su compromiso en ese momento, su vida habría sido diferente. Seguramente hubiera conocido a una persona capaz de quererla y respetarla como merecía, quizás habría sido más feliz y no hubiese tenido un final tan trágico.