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No comparten el mismo gusto
Esto es lo que nunca hizo Isabel Preysler por Mario Vargas Llosa: algo que disfruta en soledad
Una marca más de la separación.
La ruptura amorosa entre Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa a fines del año pasado despertó todo tipo de polémicas a nivel mediático, debido a que nadie esperaba que esa situación se produzca de forma repentina.
La socialité fue la que tomó la iniciativa para finalizar el vínculo con el escritor por motivos diversos, entre los cuales se destacan los celos que el peruano comenzó a demostrar durante los últimos años.
Tras la separación, la hispano-filipina se acercó mucho más a sus afectos, en particular a Tamara Falcó, quien también sufrió los conflictos propiciados por el poeta, ya que convivía con él en la misma vivienda.
Por su parte, Vargas Llosa tomó una medida similiar a la empresaria y viajó a París para compartir las celebraciones de fin de año junto a uno de sus hijos, con la intención de olvidarse rápidamente de ella.
No obstante, con el paso de los meses se conocieron algunos detalles sobre la relación que tenían Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, sobre todo cuestiones que ella disfrutaba en soledad, sin necesidad de la compañía del peruano.
Un ejemplo de ello es la tarta de chocolate negro sin harina ni azúcar que la vuelve loca. Se trata de un postre que se puede disfrutar en cualquier momento del día, acompañado de algún tipo de infusión. Hace tiempo, ella confirmó ser adicta al chocolate, algo que no compartió en ningún momento con Vargas Llosa.
