Fin del amor: el momento exacto que detonó la ruptura entre la infanta Elena y Jaime de Marichalar

Todos sabemos que los miembros de la realeza están muy lejos de demostrar perfección. La familia real española es uno de los mejores casos para ejemplificar. En este caso mostramos a la infanta Elena y Jaime de Marichalar, que fueron felices bajo un imperio de oscuras mentiras. 

Recordemos que los padres de Victoria Federica y Felipe Froilán se casaron el 18 de marzo de 1995 en la catedral de Santa María de la Sede de Sevilla, lo que marcó un acontecimiento histórico para la realeza, ya que habían pasado muchos años sin bodas reales dentro de España. El compromiso había sido anunciado unos meses antes. 

Para celebrar, eligieron realizar un viaje de luna de miel a Australia, que expresaba el amor que se tenían y la felicidad por haberlo logrado. Los primeros años de matrimonio fueron muy tranquilos. Sin embargo, los conflictos llegaron luego del nacimiento de sus hijos. Desde ese momento, la relación no volvió a ser la misma debido a que discreparon mucho en la forma de crianza que querían para ambos.

Es que habían comenzado a demostrar incompatibilidades en el vínculo familiar. La infanta Elena no estaba de acuerdo con el estilo de vida que llevaba Jaime de Marichalar. Entre las principales actitudes detestables que se mencionaron, encontramos que la hermana de Felipe VI era la encargada de llevar a sus hijos a la escuela, mientras su esposo dormía. Informa Voces Críticas. 

A pesar de que la infanta Elena ya estaba cansada y no quería saber más nada con la pareja, la reina Sofía no estaba de acuerdo con la posibilidad de divorciarse, ya que ella fue el mayor de ejemplo de sostenimiento de un matrimonio fallido, teniendo en cuenta que había tolerado todas las infidelidades y desprecios por parte de Juan Carlos I. Sin embargo, la ruptura fue inevitable y el 15 de diciembre de 2009 anunciaron el quiebre definitivo.