Felipe VI y Letizia temen por el difícil desafío que podría enfrentar la princesa Leonor

La princesa Leonor vivió el pasado fin de semana uno de los momentos más importantes de su vida, ya que cerca de cumplir sus 18 años, acompañada de su familia más cercana, celebró de graduación en el UWC Atlantic College de Gales, donde estudió el Bachillerato Internacional.

Allí, la hija del rey Felipe VI recibió su diploma con un traje rosa, y se fotografió junto a sus padres y su hermana. Ahora, en los próximos días y semanas deberá afrontar otros compromisos, como la confirmación de la infanta Sofía, o la boda real del año, la del príncipe heredero de Jordania, Hussein bin Al Abdalá.

Sin embargo, la cita más importante para la princesa Leonor es la del 17 de agosto, el día en que deberá comenzar su formación militar en Zaragoza. Aunque, antes podría tener que afrontar otro nuevo desafío.

Sucede que si miramos el camino que recorrió su padre para ser rey, encontramos otro compromiso que Leonor, no puede postergar más y que, aunque en Zarzuela quieren evitar a toda costa, le cambiará la vida. Se trata de la primera entrevista real, un reto que su padre enfrentó antes comenzar su formación militar, por recomendación de Juan Carlos I, quien se preocupó por el acoso que recibía su hijo de parte de la prensa del corazón.

La joven princesa es como invisible y hasta ahora, solo se limitó a saludar o leer comunicados en los premios que llevan su nombre. En plena era de la comunicación, sería mal visto que no siga una tradición que siguieron prácticamente todas las monarquías europeas, la de hablar públicamente para mostrarse como una joven preparada en pleno 2023, como sí lo hicieron ya otros royals cuando tenían su edad, como el príncipe Guillermo de Inglaterra, Victoria de Suecia, Íngrid de Noruega o, más recientemente, Amalia de los Países Bajos.