Tamara Falcó rompió el silencio y arremetió contra los que intentan desprestigiar su boda

Tamara Falcó está a poco más de un mes de celebrar su boda junto a Íñigo Onieva; sin embargo, algunos rumores han puesto la atención en la marquesa de Griñón por fuera de la organización de su ceremonia, que representa uno de los eventos más importantes del año. Por esta razón, la hija de Isabel Preysler decidió romper el silencio.

En primer lugar, Tamara Falcó reveló que está muy dolida con quienes aseguraron que para su boda existe algún tipo de norma dietética, en referencia los rumores que señalaban que la marquesa de Griñón estaba dispuesta a someterse a un tratamiento para bajar de peso. Ella misma aclaró en “El Hormiguero” que esto no es cierto y que el vestido será hecho a medida, por lo que no debe preocuparse por el estado de su cuerpo.



A su vez, también se despejaron dudas respecto al lugar donde se llevará a cabo la celebración el próximo ocho de julio. Debido a que había grandes rumores sobre posibles conflictos entre Tamara Falcó y el párroco de Aldea del Fresno, por unas supuestas irregularidades en la documentación presentada por la pareja, la futura novia aclaró que todo está en orden. Informa Voces Críticas

De hecho, así también lo hicieron desde la parroquia, donde confirmaron que Tamara Falcó cumple con todas las disposiciones para que su boda sea celebrada en “El Rincón”, un mítico palacio que heredó de su padre. Al parecer, lo más importante era confirmar que la residencia era propiedad de alguno de los novios y así fue luego de que la hija de Isabel Preysler presentara sus papeles.



A su vez, también se reveló uno de los detalles más importantes respecto a la unión religiosa, que tenía que ver con quién sería el sacerdote a cargo de la ceremonia. Según se reveló, esta responsabilidad estará a cargo de un párroco amigo de Tamara Falcó e Íñigo Onieva; una decisión que la pareja tomó hace meses pero mantuvo en el anonimato.