El verdadero motivo por la que Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover no se han divorciado

La vida amorosa de Carolina de Mónaco siempre ha sido objeto de atención y controversia, especialmente su matrimonio con Ernesto de Hannover, del cual aún no se ha divorciado oficialmente a pesar de vivir separados durante años. Pero, cuál es el real motivo que los ha mantenido unidos. Aquí te lo explicamos.

Tras la trágica muerte de su esposo Stéfano Casiraghi en 1990, Carolina encontró consuelo en la compañía del príncipe Ernesto de Hannover, quien estaba casado en ese entonces. Los rumores sobre una relación entre ellos se intensificaron en los años siguientes, hasta que finalmente contrajeron matrimonio en 1999. 

Sin embargo, la relación enfrentó numerosos escándalos y problemas, lo que eventualmente llevó a su separación en 2008. Aunque se especuló que la hermana mayor del príncipe Alberto mantenía su matrimonio para conservar el título de princesa de Hannover, la realidad es más compleja. Su decisión se basa en apoyar a su hijastro Ernesto Jr., quien enfrenta disputas con su padre por la herencia familiar. 

Ernesto Jr. necesita el consentimiento de su padre para casarse y heredar su legado, algo que aún no ha ocurrido. Es por ello que Carolina, al mantenerse casada, impide que Ernesto de Hannover pueda casarse nuevamente y tener otro heredero oficial que pudiera disputar la sucesión.

Aunque viven vidas separadas, la princesa mantiene una relación cercana con sus hijastros. Además, se sugiere que la inestabilidad y los problemas legales de Ernesto también influyen en la decisión de no divorciarse. Esta situación única revela la complejidad de las relaciones en la realeza y cómo los lazos familiares y las cuestiones sucesorias pueden influir en decisiones aparentemente personales.