La difícil decisión que debió tomar Máxima de Holanda sobre su madre: un cambio radical en su vida

La casa de Máxima de Holanda experimenta un cambio significativo con la llegada permanente de su madre, Carmen Cerruti, un anhelo largamente acariciado por la argentina. Después de residir algunas temporadas en Huis ten Bosch, la madre de Máxima ahora se instala junto a su hija y sus nietas, cumpliendo así el deseo de la reina.

El nuevo hogar no escasea en espacio, ya que el palacio abarca alrededor de 9.000 metros cuadrados, distribuidos en áreas oficiales y privadas para la familia real. Según informan medios holandeses y alemanes, la propia Máxima  habría insistido en que su madre se estableciera definitivamente con ella.

Esta resolución trae un gran alivio para la reina, quien había estado preocupada por su madre, que vivía sola en Buenos Aires mientras sus hijos estaban dispersos por el mundo. La muerte de la hermana menor de Máxima, Inés Zorreguieta, intensificó el deseo de tener a su madre cerca, motivando sus frecuentes viajes a los Países Bajos. Informa Voces Críticas.

Aunque se desconoce si esta mudanza generará polémica como ocurrió hace cuatro años, cuando las restricciones de viaje durante la pandemia mantuvieron a Carmen en Huis ten Bosch durante más tiempo del previsto. Entonces, se cuestionó la conveniencia de que la madre de la reina hiciera uso de un edificio oficial.

Sin embargo, más allá de posibles controversias, Máxima logra su objetivo de tener a su madre cerca, un deseo alimentado desde la pérdida de su padre en 2017 y de su hermana poco después. La llegada de Carmen Cerruti a Huis ten Bosch representa un nuevo capítulo en la vida de la familia real holandesa.