Última hora

DE TERROR

Le hacía bajarse los pantalones y lo tocaba: el crudo testimonio de una de las víctimas del "Sa-cerdote" Rosa Torino

Declaró una de las víctimas que sufrió los abusos sexuales por parte del religioso

Le hacía bajarse los pantalones y lo tocaba: el crudo testimonio de una de las víctimas del "Sa-cerdote" Rosa Torino

SALTA (Redacción Voces Críticas) En la jornada de este viernes 25 de junio, finalmente se llevó a cabo la primera audiencia del juicio oral en el que se encuentra implicado el sacerdote Agustín Rosa Torino por varias denuncias de "abuso sexual gravemente ultrajante". Ahora exponemos el crudo testimonio de una de las víctimas del religioso.

A partir de las 13 horas de ayer, se llevó a cabo el puntapié inicial del juicio en el "Salón de Grandes Juicios", contra el cura Agustín Rosa Torino, que se encuentra imputado por haber cometido los delitos de "abuso sexual gravemente ultrajante agravado por ser un ministro de un culto religioso" y de "abuso sexual simple agravado" en perjuicio de una tercera.

El crudo testimonio

Yair Gyurkovits, fue una de las víctimas del cura Rosa Torino que se animó en 2015 a denunciar a este por los actos aberrantes que el religioso había cometido en perjuicio de él. Es así que sin pelos en la lengua se dispuso a hablar frente al tribunal presidido por el juez Maximiliano Troyano e integrado por los jueces Norma Vera y Roberto Faustino Lezcano.

Según indicó Gyurkovits los abusos por el sacerdote comenzaron en el año 2014, y la primera vez que este se sobrepasó fue en una visita que hizo a la casa en donde estaba viviendo. Con respecto a esto detalló que en un momento quedaron solos en una habitación y Rosa Torino le preguntó si se masturbaba, luego le dijo que lo iba a revisar, lo cual aceptó con mucha vergüenza al tratarse de un ser superior al que le tenía mucha confianza.

Gyurkovits también señaló que el cura le hacía bajarse los pantalones y le miraba los testículos y en otras ocasiones también lo tocaba. Terrribles actos que tenían lugar en las casas de la congregación de Palermo Oeste, en Cachi, y en Finca La Cruz, en la capital salteña. Luego de esto, ya un año después el joven entró en depresión dejó la comunidad religiosa y denunció a su abusador.

SEGUÍ LEYENDO
Últimas noticias
MÁS LEÍDAS