Escándalo por una salteña divorciada de un mexicano que le quitó el hijo

SALTA (Redacción Voces Críticas). El caso de una salteña que fue pareja del famoso actor de México se dio a conocer hoy. Se trata de un caso de violencia vicaria. El caso más resonante que involucra a una mujer de nuestra provincia.

"Tengo miedo de ir a Morelos", dice Irene, quien no puede ver a su hijo hace más de un año, según informó el medio El Tribuno. Su madre la acompañó a hacer la denuncia por el secuestro de su hijo por parte del actor Guillermo del Toro, quien lo tendría ilegalmente viviendo con él sin tener la custodia.

La salteña se separó del actor en el 2013 y hasta el 2017 estuvo en Salta. Contó que hasta ahí tenía una buena relación. "A mi hijo le cuesta mucho todo, dicen en Argentina que tiene retraso madurativo, y aquí dicen que es trastorno del espectro autista, así que él tenía muchas rehabilitaciones y él siempre me mandaba el dinero suficiente para la manutención y sus terapias", contó la artista.

Irene se había a México a probar suerte en su carrera artística. En ese país explicó: "No me pasaba más dinero hasta que una jueza dicta una cuota mínima de 3 mil pesos mejicanos y él pasaba mil. No me alcanzaba para las terapias así que abandoné mi trabajo y me dediqué de lunes a viernes a mi hijo llevándolo a todas las terapias desde la mañana hasta la noche”.

El trastorno autista de su hijo y su tratamiento fue difícil. En un momento el actor hizo una denuncia para que dejen de medicarlo con metanfetaminas, explicó El Tribuno. Luego la salteña se muda de Distrito Federal a la ciudad mexicana de Morelos: "Justo estábamos buscando una casita para poder mudarnos y aprovechar las vacaciones para que mi hijo se vaya con su papá”, contó y se dio cuenta que el actor le había robado cosas y se fue con su hijo.

Violencia vicaria

La violencia vicaria se refiere a situaciones en las que los seres queridos de la mujer, en este caso los hijos, son utilizados injustamente. En este tipo de violencia, la Justicia actúa mediante la omisión o la acción a favor de los padres. El caso continúa en la justicia mexicana: "Dijeron que no me lo podían dar porque otro juez de otro municipio le había dado la guarda y custodia al padre. Sin importar que una procuradora de menores y psicóloga, cuando ya lo habían secuestrado, diga que no sabe ni quién es el padre porque nunca pasó por la defensoría ni siquiera por la otra causa que él mismo denunció", indicó Irene.