Según Bolivia, la contaminación del río Pilcomayo por el derrame no sería muy significativa

Salta - (Redacción Voces Críticas) En los últimos días se habló bastante sobre el derrame minero en Bolivia que habría contaminado el río Pilcomayo. Las autoridades locales se mantenían en vilo ante la inminente llegada del agua con residuos.

Sin embargo, desde el país vecino, el administrador del Sistema de Monitoreo y Alerta Participativo de la Cuenca, Luis María de la Cruz, trató de llevar calma.

"El material que se está retirando del área de escurrimiento y con la poca agua que circula, lo más pesado va a quedar cerca de Potosí. El resto se irá diluyendo en la medida que comiencen las lluvias hacia noviembre. Algo va a aumentar sobre los niveles corrientes de contaminación; pero creo que se está exagerando en los medios", indicó.

Sin embargo, advirtió que el Estado Plurinacional de Bolivia debe mejorar su sistema de certificación y control de estas presas. Además, los gobiernos deberán hacer las demandas correspondientes a quienes fueron responsables del derrame.

Sobre el derrame en sí, indicó que se lo controló rápidamente. E incluso, que no fue un volumen significativo, dado que los diques de cola de las cooperativa son pequeños.

Según entiende el funcionario, la relevancia que tomó el caso se debe a que a las grandes mineras les sirve para atacar contra las pequeñas cooperativas mineras.

"El accidente ocurrió y se debe a fallas de construcción del dique de cola; pero lo que derramó no se puede comparar con los accidentes de grandes mineras que hubo en 1996 y en 2014, cuyos derrames fueron tremendos y no se los controló enseguida, como ocurre ahora", indicó Luis María de la Cruz.

Además, es relevante indicar que el Pilcomayo siempre indica altos niveles de contaminación por metales pesados: boro, plomo, arsénico y demás. Esto es comprobable a partir de los estudios de calida dde agua que hace la Trinacional desde 2007 en adelante.

"Tomar medidas exageradas como las que sugiere el gobierno de la provincia, solo alimenta el temor de la población ante un fenómeno que no se sabe si llegará a impactar sobre el río y que, de hecho, aún no se tiene ninguna información cierta", concluyó el funcionario.

Por el momento, las investigaciones sobre impacto ambiental aún no están concluidas, por lo que las autoridades locales se mantienen expectantes para saber cómo proceder.