El mal humor que demuestra el rey Carlos III a sus ayudantes por estas exigentes órdenes

El rey Carlos III quedó en la mira de todos tras viralizarse un video dentro del carruaje con Camila Parker previo a la coronación. Ante lo ocurrido, recordamos otros hechos donde lo hemos podido ver con una actitud impaciente y furiosa, algo que se desconocía en él hasta este momento.

Una de las posibilidades del mal humor del monarca, podría ser por la situación que transcurrió en torno a la ceremonia. Además, esto podría haber sido producto del nerviosismo que ha estado viviendo en los días previos, ya que no podían tener errores una vez dentro de la Abadía de Westminster.

🇬🇧 | Carlos III, el flamante rey, hizo un gesto captado hoy cuando se molestó por un tintero que entorpecía su firma del documento real y dio su orden, con fastidio, a un ayudante para que realizara una tarea que él mismo podría haber hecho. pic.twitter.com/duruN3J2lg

— Alerta News 24 (@AlertaNews24) September 10, 2022

Tres días después de ser rey, ocurrió el primer enfado del soberano cuando se sentaba en una mesa para firmar unos papeles. Allí, al querer colocar su rúbrica en los documentos, le molestó un tintero. En ese momento, pidió a un empleado que tomara el objeto y lo retirara por él. Esas imágenes quedaron grabadas y más que nada sus gestos de desprecio que hizo. Informa Voces Críticas

Luego, se popularizaron unas imágenes por una tinta que se interponía en su camino que terminaron de mancharlo. Al querer firmar unos documentos reales, se dio cuenta que la pluma que estaba usando perdía su tinta y eso hizo despertar su enfado. En el momento se expresó diciendo: "¡No puedo soportar esta maldita cosa!", mientras se retiraba dejando a su esposa.

"I can't bear this bloody thing!": King Charles' signing ceremony at Northern Ireland's Hillsborough Castle made one thing clear – even royalty can't escape the frustration of an inadequate pen. pic.twitter.com/nzygNTLslX

— CBS News (@CBSNews) September 13, 2022

Por último, fue lo ocurrido en el día de su coronación donde el rey Carlos III se enojó desde adentro del carro porque su hijo, el príncipe Guillermo, no llegaba a la Abadía. Allí se pudo ver el malestar de por qué no llegaban los príncipes de Gales. Al parecer, la paciencia será algo que deberá trabajar y así evitar tener rabia.