El rey Carlos III ataca el punto débil de Meghan Markle y concreta esta cruel venganza

Cuando el príncipe Harry y Meghan Markle abandonaron a la familia real, el rey Carlos III direccionó todo su odio hacia su nuera, debido a que consideró que era ella la gran responsable de esta idea. Es por eso que el máximo monarca ha decidido intervenir en la crisis matrimonial de los duques de Sussex para vengarse de la norteamericana.

La estrategia del rey Carlos III para dañar a Meghan Markle tiene que ver con Archie y Lilibet. La prensa internacional aseguró que el padre del príncipe Harry está obsesionado con lograr quitarle la custodia de los niños a la duquesa de Sussex. Por esta razón, el esposo de Camila Parker le brindó su apoyo a su hijo menor y lo convenció de pelear por sus dos pequeños niños.



Se viven horas muy tensas en la mansión de California; Harry y Meghan ya no discuten sobre las posibilidades de reconciliación sino por los diferentes beneficios que ambos buscan sacar de su divorcio. La prensa internacional aseguró que los duques de Sussex han cruzado todos los límites esperados y que, actualmente, viven una vida repleta de gritos y fuertes enfrentamientos, algo que beneficia notoriamente al plan de Carlos III Informa Voces Críticas

Debido al desacuerdo del príncipe Harry por acceder a los pedidos de Meghan -quien exige una remuneración de 80 millones de dólares, la custodia de sus dos hijos y mantener su título nobiliario- se ha rodeado de un equipo de abogados experto en divorcios, para ganar esta contienda y concretar sus nuevos planes: mudarse a Reino Unido y regresar bajo el ala del rey Carlos III.



Mientras tanto, el esposo de Camila Parker intenta manipular al príncipe Harry para convencerlo de que Archie y Lilibet deben estar en Reino Unido. El rey Carlos III considera que lo mejor para ambos niños es que sean criados como príncipes y educados para que se dediquen de por vida a sus labores institucionales, algo con lo que Meghan Markle no está de acuerdo.

Pese a que el rey Carlos III ha intentado ocultar este escándalo, no pudo evitar que su acercamiento al príncipe Harry saliera a la luz. El máximo monarca está convencido de que esta es su gran oportunidad para vengarse de Meghan Markle, quien jamás le agradó y a quien acusa de haber alejado a su hijo de la monarquía durante los últimos tres años.