Ante dudas, odontólogos salteños afirman que están autorizados a colocar ácido hialurónico y bótox

SALTA (Redacción Voces Críticas) La habilitación para la colocación de bótox y ácido hialurónico se volvió uno de los temas más debatidos y polémicos dentro de la sociedad. Es surge la duda sobre qué profesionales están autorizados para realizar dicha prácticas además de médicos. En ese sentido, odontólogos salteños salieron a aclarar las consultas.

 Es que los dentistas se vieron obligados a evacuar las dudas sobre el tema, en medio de las denuncias que se presentaron por la realización de dichas prácticas en lugares que no están habilitados para eso, como es el caso de centros de estética.

En diálogo con FM Profesional, la presidente del Colegio de Odontólogos de Salta Paola Corai, indicó que médicos y dentistas son los únicos profesionales habilitantes para hacer tratamientos estéticos o terapéuticos relacionados con el uso de  toxina botulínica (botox) y microfillers (ácido hialurónico), cumpliendo con el procedimiento dentro de actuación correspondiente.

Sobre eso, expresó que hay una reglamentación de la Federación Argentina de Colegios de Odontólogos, que establece que los dentistas son competentes para realizar estás prácticas. Por otra parte, señaló que varias universidades argentinas incluyen dicha enseñanza en sus currículas.

Además, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), desde 2016, habilita a dichos profesionales a adquirir botox y ácido hialurónico. Sobre la aplicación, Corai afirmó que se hace con objetivos terapéuticos, pero que cada vez son más los pacientes que llegan al consultorio para hacer tratamientos estéticos relacionados con arrugas, infiltraciones o aplicación en mejillas y labios.

Con respecto a la normativa vigente, manifestó que un dentista está habilitado para hacer prácticas en el tercio inferior facial. No obstante, aclaró que siempre hay que capacitarse y obtener los permisos públicos correspondientes.

Por último, señaló la recomendación permanente de recurrir a la aplicación del botox en casos de padecimientos de rechinamiento y bruxismo, articulación temporomandibular, sonrisa gingival o dolores orofaciales.