No más tacos altos: Kate Middleton y Letizia muestran su nueva tendencia en zapatos

El protocolo del vestimenta para reinas y princesas ha empezado a relajarse... por los pies. Tanto Kate Middleton, la más firme defensora de la bailarina, como la Reina Letizia ya han acudido a eventos más o menos formales con los talones a ras de suelo. No son las únicas. De momento a la reina Máxima de Holanda es difícil verla sin stilettos, pero ya ha calzado bailarinas combinadas con outfits muy formales, como uno color mostaza que vistió en su visita oficial a Grecia. Camilla de Inglaterra, por el contrario, lleva más tacón desde que es reina, aunque siempre opta por una altura discreta y a menudo por un tacón ancho, mucho más cómodo.

El cambio hacia lo confortable parece estar extendiéndose por las filas reales. Kate Middleton, conocida por su elegancia y su apego a las tradiciones, sorprendió a todos recientemente al aparecer en público luciendo un par de zapatillas blancas impecables, acompañando un blazer formal sobre vaqueros pitillo, mostrando así su faceta más informal y desenfadada.

Siguiendo la tendencia de comodidad, la princesa Beatriz de York también se unió al movimiento al ser vista en un evento con un par de bailarinas resaltadas por una puntera metálica, demostrando que la realeza está abandonando la formalidad estricta en favor de la comodidad y la practicidad en su vestimenta. Informa Voces Críticas.

Mientras tanto, Doña Letizia, conocida por su elegante presencia y su característico gusto por los tacones altos, está explorando nuevas opciones de calzado bajo. Aunque su imagen ha estado asociada durante mucho tiempo con altísimos tacones, su reciente aparición en unas bailarinas de charol negro con una hebilla cuadrada demuestra su adaptación progresiva a esta tendencia más relajada.

Este cambio en las preferencias de calzado de Kate Middleton y las royals parece marcar una nueva era en la moda de la realeza, donde la comodidad y la practicidad se entrelazan con la elegancia y la sofisticación, creando un nuevo estándar de estilo que equilibra la tradición con la modernidad.