La receta árabe que siempre quisiste tener: el delicioso falafel casero que alegrará a tu familia

El falafel, un plato emblemático de la cocina mundial, ha conquistado los paladares de diferentes rincones del planeta. Esta deliciosa y crujiente receta, representa una fusión única de sabores y texturas arraigada en la rica tradición culinaria del Medio Oriente.

El falafel es un manjar de pequeñas porciones con una receta repleta de especias aromáticas y hierbas frescas, siendo más que una simple exquisitez, una manifestación de la diversidad y creatividad que caracteriza a la gastronomía árabe.

Hoy, aprender a preparar falafel en casa se ha convertido en una actividad accesible y económica, utilizando ingredientes simples y comunes en cualquier cocina. A menudo se acompaña con una deliciosa salsa tahini, aunque cualquier salsa fresca es ideal para realzar su sabor durante una reunión o cena especial.

Ingredientes para la preparación:

• 2 tazas de garbanzos secos (remojados durante la noche)
• 1 cebolla grande, finamente picada
• 4 dientes de ajo, picados
• 1 taza de perejil fresco, picado
• 1 taza de cilantro fresco, picado
• 1 cucharadita de comino molido
• 1 cucharadita de cilantro molido
• 1/2 cucharadita de pimienta de cayena (ajustar según preferencia de picante)
• 1 cucharadita de sal
• 1/2 taza de harina de garbanzo
• 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
• Aceite vegetal para freír

Procedimiento paso a paso:

Remojar los garbanzos secos en agua durante la noche. Escurrir antes de usar. En un procesador de alimentos, combinar los garbanzos escurridos, la cebolla, el ajo, el perejil, el cilantro, el comino, el cilantro molido, la pimienta de cayena y la sal. Procesar hasta obtener una mezcla gruesa y granulada.

Agregar la harina de garbanzo y el bicarbonato de sodio a la mezcla. Mezclar bien para incorporar y crear una textura más compacta. Luego, cubrir la mezcla y dejar reposar en la heladera durante al menos 1 hora. Este paso ayuda a que la mezcla sea más manejable al formar los falafels.

Con las manos ligeramente humedecidas, formar pequeñas bolas de la mezcla y aplanarlas ligeramente para darles forma de disco. 

Calentar suficiente aceite en una sartén a fuego medio para freír los falafels hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados. Retirar los falafels dorados y colocar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Informa Voces Críticas.

Servir los falafels calientes con pan pita, salsa y ensalada fresca a gusto.

Tip: Puedes experimentar agregando hierbas adicionales como menta o eneldo a la mezcla para un toque aún más fresco. Para una versión más saludable, puedes hornear los falafels en lugar de freírlos.