Por error una familia salteña es atacada reiteradamente por narcotraficantes y temen por sus vidas

Salta (Redacción Voces Críticas) Es un hecho sabido que en los últimos años han ido en crecimiento las organizaciones narcocriminales dentro de Salta. Todos los días se denuncian variados crímenes mafiosos así como también diversos sucesos vinculados al narcotráfico y derivados. En este marco nos encontramos con la terrible pesadilla que hoy viven Luis Chalup, su mujer y sus hijos porque su familia es atacada en el barrio Los Lapachos con amenazas que afirman no saber por qué les suceden.

Deseando que estos ataques culminen, Luis decidió junto con su familia contar todo lo que están viviendo. Relató que los hechos iniciaron el día domingo cuando se encontró con escrituras en su auto y otro auto que estaba allí también, "pagá la droga" era la frase escrita junto a un círculo y una cruz. El hombre, creyendo que no era algo de importancia, borró los escritos con alcohol sin tomar dimensión de lo que ocurría.

Llegado el martes por la noche, al volver a su casa, dejó el auto estacionado afuera. Alrededor de las 2 de la madrugada se despierta y mirando por la ventana toma cuenta de que su auto estaba prendiéndose fuego en la calle. Luis señaló que salió a los gritos intentando apagar el fuego con la manguera del jardín mientras los niños ayudaban con baldes y la policía con matafuegos. Finalmente con la llegada de los bomberos el incendio pudo ser extinto.

Mientras esta familia es atacada con terribles amenazas, piden desesperados protección policial debido al momento horroroso que viven. Él comenta que cuatro hijos lloran de miedo y todos en general temen a que suceda algo peor. Destaca que ya realizó la denuncia correspondiente y pidió custodia permanente, piensa que esto debe ser una confusión y espera que se den cuenta de que no son ellos a quienes quieren realmente amenazar.

Hoy, la familia se encuentra a la espera de que la denuncia llegue a Fiscalía y se solicite la custodia que pidieron ante un Juzgado. Mientras tanto, la familia se turna para dormir y poder estar atentos ante la posibilidad de un nuevo ataque. No quieren tener que esperar los siete días que les dijo la policía hasta la decisión del Juzgado, ya que temen por sus vidas y solicitan seguridad urgente.