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Abuelas de Plaza de Mayo

Las Abuelas de Plaza de Mayo restituyeron la identidad del nieto 133: así fue el reencuentro con su familia

Se trata del hijo, de 46 años, de Cristina Navajas y Julio Santucho

Las Abuelas de Plaza de Mayo restituyeron la identidad del nieto 133: así fue el reencuentro con su familia

Argentina (Redacción Voces Críticas) En una emocionante conferencia de prensa realizada en Casa por la Identidad, en el Espacio Memoria y Derechos Humanos, Abuelas de Plaza de Mayo anunció hoy la restitución del Nieto 133, hijo de Cristina Navajas y Julio Santucho. El hombre, de 46 años, pudo finalmente reencontrarse con su padre y sus hermanos gracias a los incansables esfuerzos del organismo.

"La vida nos quiere regalar una alegría en un momento difícil de nuestra querida Argentina, encontrar otro nieto, devolver la identidad, que se encuentre que tiene padre, hermanos", expresó Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo, en un emotivo anuncio que conmovió a todos los presentes.

El Nieto 133 se acercó a la organización de manera espontánea y fue anotado como hijo propio de un miembro de las fuerzas de seguridad y una enfermera. Desde joven, tuvo dudas sobre su identidad, pero con valentía logró acercarse a Abuelas para iniciar la búsqueda de sus raíces. En abril de este año, se realizó el examen genético en el Banco Nacional de Datos Genéticos, lo que finalmente confirmó su verdadera identidad.

La historia de Cristina Navajas y Julio Santucho está marcada por la tragedia y el dolor causado por la dictadura militar. Cristina estaba embarazada de dos meses cuando fue secuestrada en 1976, junto a su cuñada Manuela y Alicia Raquel D'Ambra, también embarazada. Los dos hijos de la pareja, Camilo, de tres años, y Miguel, de 9 meses, junto al hijo de Manuela, fueron abandonados en el lugar.

Julio, quien se encontraba en el exterior cuando Cristina fue secuestrada, se enteró días después de su desaparición y pudo reunirse en Europa con sus hijos. Las mujeres pasaron por varios centros clandestinos de detención y siguen desaparecidas. Sin embargo, Cristina logró dar a luz a su hijo, quien 46 años después ha sido identificado gracias al incansable trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo.

El "Tano" Santucho, hermano del Nieto 133, compartió sus emociones durante la conferencia de prensa: "Tengo la sensación de haber encontrado un ser luminoso, especial, y no tengo dudas de que vamos a estar juntos el resto de nuestras vidas. Nos buscamos, nos quisimos encontrar, y el abrazo que nos dimos es para siempre".

Julio, el padre del Nieto 133, reveló que su hijo sabía desde hace varios años que no era hijo biológico de sus padres y que inició la búsqueda hace 4 o 5 años, aunque se vio interrumpida por la pandemia. La restitución de su identidad es una victoria de la democracia y una derrota de la dictadura, pues ellos intentaron arrebatar a los hijos y ahora están siendo recuperados.

La historia del Nieto 133 es un ejemplo más del incansable trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo en la búsqueda de la verdad y la identidad de los nietos y nietas desaparecidos durante la dictadura militar. Esta nueva restitución es un testimonio conmovedor del poder de la memoria y la lucha por los derechos humanos. Informa Voces Críticas.

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